n el oficialista portal del Gobierno del Estado, publicación que, por cierto, debería estar dedicada a brindar información gubernamental útil a la población y no a promocionar la imagen personal de sus funcionarios, puede leerse:
“En 1999 (Luis Armando Reynoso Fermat) rindió protesta como presidente municipal y fue calificado como el mejor gobernante por empresas periodísticas, financieras y evaluadoras (¿?) de gobiernos”.
Y continúa: “En el 2001, el Cabildo encabezado por Reynoso Femat aprobó el contrato de usufructo que permitió la llegada del Club Necaxa a Aguascalientes, el más moderno y seguro del país… que sigue siendo propiedad del municipio. Por la promoción que realizó del fútbol en Aguascalientes, Luis Armando fue nombrado presidente Honorario del Patronato de Fomento de Futbol, A. C.
“El 26 de julio de 2003 se cristalizó este sueño con la sublime [sic] inauguración del Victoria, que estuvo a su máxima capacidad”.
Ocho años más tarde las noticias difieren con mucho del tono festivo y “sublime” que tuvieron entonces.
Ahora nos enteramos que el Necaxa, recién descendido a Primera “A”, tiene un adeudo con el Gobierno del Estado, encabezado por el otrora alcalde capitalino Luis Armando Reynoso; por la importante suma de 98 millones de pesos.
Además, nos encontramos con que en la cláusula 13 del contrato entre Necaxa y el Gobierno del Estado realizado en 2001, se establece que en caso de que el equipo de futbol Necaxa descienda a la Primera División A, el gobierno deberá entregarle el equipo a Grupo Televisa. Infaustamente, tal convenio fue acordado por Luis Armando Reynoso Femat, actual gobernador, y Justino Compeán, entonces presidente necaxista.
En efecto, Justino Compeán era entonces el primer presidente de los denominados Hidrorrayos, y, sin embargo, dejó al club para irse como presidente de la Federación Mexicana de Futbol, con lo que tomaba las riendas del futbol profesional, labor que realiza hasta la fecha.
Después lo sucedieron Javier Pérez Teuffer, Marco Antonio de Alba –actual presidente del Patronato de Fomento al Futbol de Aguascalientes, A. C.-, Miguel Ángel “Zurdo” López y, finalmente, el empresario local Roberto Muñoz.
Volvamos ahora, estimado lector, al texto publicado en la página oficial de Gobierno del Estado… “el pasado 6 de agosto (2003), Emilio Azcárraga, presidente de Televisa, inauguró junto con Luis Armando Reynoso la casa club del Necaxa. Ubicada al poniente de la ciudad, tiene una extensión de ocho hectáreas, y cuenta con instalaciones de primer nivel que garantizan (quizás la garantía expiró) la excelente preparación física y mental de los jugadores”.
¿Será, apreciable lector, que este asunto del Necaxa siguió el mismo proceso que la dirección gubernativa de Luis Armando? Quizás, como en tantas otras de sus acciones, hemos ido de lo sublime a lo mediocre. Y todo en escasos ocho años.