Inauguraron el centro educativo y productivo Bancomer y la incubadora social el Dorado, del Tecnológico de Monterrey donde se buscará atender al menos, de inicio, a entre 50 y 70 microempresarios y 500 usuarios, cantidad similar a la de la inbucadora que ya viene funcionando en la colonia España.
La apertura de este nuevo centro que forma parte de las iniciativas del instituto de desarrollo social sostenible (IDeSS) del Tecnológico de Monterrey surgió por una necesidad que manifestó la misma comunidad recabada a través de una encuesta en donde se les preguntó a las personas, qué esperaban de la institución, su respuesta fue que todos los conocimientos que generan se utilizarán para apoyo de la sociedad, aseguró Daniel Mora Máynez, director de esta institución educativa.
El director del Tecnológico no quiso hablar de cantidades concretas de inversión, pues la habilitación y equipamiento del espacio corrieron a cargo de ambas instituciones, pero es más el valor de los servicios que a través de esta estructura de programas que van a brindar, además de las horas de servicio social, los programas de secundaria y preparatoria, es invaluable.
Los servicios que el Tecnológico brinda a través del IDeSS son cuatro, la incubadora, secundaria net, prepanet en la cual ya tienen cerca de 200 alumnos – que van desde los chicos de preparatoria hasta adultos de 65 años de edad- y se pretende crecer al doble a través de este proyecto naciente, los más de 120 programas de educación continua, además de las asesorías y tutorías.
En este nuevo centro no tienen un límite para la cantidad de estudiantes que se van a integrar en este proyecto para brindar sus servicios, sólo dijo Daniel Mora que también como meta mínima pondrán la cantidad de horas de servicio que hasta ahora dado en la incubadora ya existente, por donde han pasado cerca de mil, que han dado alrededor de 61 mil horas de servicio.
Aún no tienen determinado cuánto será el costo de los servicios, pero la intención es que sea algo simbólico y buscan además siempre un subsidio a través de la secretaría de economía para que les provea de apoyos que se traduzcan en beneficio de los micro- empresarios.
Ante la crisis hay gente que suele replegarse o conducirse con cautela, pero por otra parte hay quienes aún en esta situación hay quienes en estos momentos creen que es oportuno e ideal para abrir un negocio, a pesar de las condiciones actuales de la economía. En la incubadora, la mayoría de los proyectos que llegan para asesoría son empresas ya iniciadas a quienes les hace falta un plan de negocios, no tienen imagen definida, no tienen plan de mercadotecnia o no tienen conocimientos básicos de contabilidad. Aún con la crisis, Daniel Mora consideró que no bajará el nivel de servicios de la incubadora social.




