Aunque la diputada federal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Lorena Martínez Rodríguez señaló que en materia legislativa hay grandes avances en el tema de salud, subrayó los pendientes que quedarán para la próxima legislatura en el que destaca la planeación del seguro popular, porque de lo contrario habrá un colapso del mismo en 10 años, advirtió.
Estas aseveraciones es encuentran sustentadas según sus declaraciones en un dictamen que exige una revisión exhaustiva de su funcionamiento, porque de lo contrario “vamos a tener una insuficiencia presupuestal para el mantenimiento del seguro popular”.
La tendencia según los estudios es que la revisión es urgente sobre todo por las enfermedades a las que se está enfrentando el país, mismas que cada vez son más graves y aumentan el costo de tratamiento.
Dijo que entre las problemáticas se encuentra también el apoyo notable a las entidades panistas respecto a los ejercicios presupuestales en salud, lo que inició desde el sexenio foxista, donde el entonces presidente de la república, Vicente Fox tuvo a bien enfatizar los recursos hacia el estado de Guanajuato, argumentó.
Los privilegios son otros cuando en dicha entidad se gastan hasta 3 mil pesos por cada afiliado al seguro popular y el promedio en otras entidades llega a ser de la mitad, “hay discrecionalidad en uso de los recursos, por supuesto por cuestión partidista”.
Recordó que el inicio del seguro popular fue en el 2003 y por lo tanto, existen indicios muy claros de estas benevolencias a las entidades ya que también algunas compran los medicamentos hasta 400 por ciento más caro que otras, “denota que hay falta de transparencia o definitivamente corrupción, no se explica de otra manera”.
Atendiendo a esta cuestión, recordó que en el presupuesto del 2010 deberá de integrarse una clausula para que haya un marco único de precios de medicamentos en el seguir popular, prohibiéndole a los estados adquirir fármacos por encima del promedio nacional, lo que tendrá como resultado un ahorro al gobierno federal y mayor extensión de estos beneficios.
Comentó que en esta gestión de la cámara de diputados pudo lograrse una mayor gestión de recursos para el sector, lográndose gracias a la articulación de los partidos políticos, “el seguro popular por ejemplo creció casi 500 por ciento de su presupuesto”.
Informó que de acuerdo a la infraestructura hospitalaria, el país creció en un 14 por ciento, significando que hay mayores hospitales y números de cama en disposición de los habitantes; sin embargo, este progreso es apenas el inicio porque según los estándares de la Organización Mundial de la Salud (OMS) México sigue estando por debajo del estándar por cada 100 mil habitantes. El rezago es de casi el 10 por ciento según lo percibido por la OMS, “pero el camino es el correcto”, puntualizó.
Uno de los avances que confió es el impulso al uso de los medicamentos genéricos, “haciendo que la medicina sea más accesible con una cobertura más universal”, realizándose en dos vías; en primer lugar con la modificación de la ley para que haya una regulación estricta, garantizando que los medicamentos intercambiables son “bioequivalentes”.
Reiteró que este punto es de suma importancia porque permite a las clases más vulnerables contar con una opción de compra de productos con un bajo costo.
En una segunda vertiente, comentó que el combate al tabaquismo es uno de los tópicos que se suman al progreso de la salud pública en el país, pues aunque este tuvo efectos un tanto negativos por las afectaciones a la inversiones de restauranteros, “éramos uno de los pocos países que no protegía a los no fumadores”.
A pesar de esta polémica que se desató en torno a la aplicación de esta ley, aseguró que la iniciativa privada ya está incorporándose a este proceso y avanzando en el mismo, comprendiendo la sociedad civil que el tabaquismo a larga está matando más personas que otras enfermedades, además de que tiene un costo importante en el sector salud.
“Es una ley que en 10 años le deberá de reducir un costo importante a nuestro país”, considerándola como una legislación de avanzada y de las más relevantes en la legislatura.
En los pendientes de la legislatura está el de la aprobación para la atención de enfermedades nosocomiales, es decir, el contagio de infecciones hacia un enfermo cuando éste ya se encuentra en un hospital, indicando que México se encuentra también arriba de otros países en estos índices, “recibe alrededor de 70 millones de internos al año y de esos, 700 mil personas adquieren una nueva bacteria, de los mismos, son 70 mil los que tienen una enfermedad que deriva en una erogación de más de 140 mil millones de pesos”.
A su parecer uno de los escenarios que corroboró estas cifras fue el contagio de influenza, donde cerca del 90 por ciento fallecieron por la complicación de la enfermedad en el hospital y otro tanto por la tardanza de la reacción ante los síntomas, agregó.
