Para los seres humanos el tema de la salud cobra cada día mayor relevancia, ya que si no gozamos de buena salud no podemos vivir plenamente. El bienestar del cuerpo y de la mente, nos permite realizar todas nuestras funciones cotidianas.
El crecimiento de un país no sólo se basa en lo económico, también en la salud y la educación, tenemos como ejemplo los países europeos.
Suecia, Noruega, entre otros países gozan de la mejor calidad de vida de sus habitantes, gracias a sus políticas públicas en materia de educación y salud.
La Organización Mundial para la Salud define a ésta como: “El estado completo de bienestar físico, mental y social y no sólo la ausencia de enfermedades”.
En nuestro país la salud se encuentra estrechamente ligada a la economía. La combinación entre las políticas sociales y el manejo de los recursos económicos son los medios determinantes para contar con la infraestructura material y el personal médico suficiente para atender a las necesidades de la población.
A diferencia de muchos países como Estados Unidos, en México tenemos un sistema de seguridad socializado lo que nos permite acceder a los servicios básicos a través de cuotas tripartitas que son cubiertas por el Estado, el patrón y el particular y también contamos con programas especiales como el Seguro Popular que brinda atención médica a personas de escasos recursos.
El Instituto de Salud de Aguascalientes cuenta con 5 hospitales generales y 2 de especialidades que el año pasado alcanzaron una ocupación de 103 y 107 por ciento respectivamente, esto quiere decir que superaron su capacidad instalada en atenciones e indica que es necesario invertir mayores recursos en materia de salud.
En comparación con otras entidades federativas aún hace falta mucho por hacer. Para el año 2006 en Aguascalientes se contaba con 75 camas censables, mientras que en estados como Campeche, Colima, Durango, Jalisco, Nuevo León y Tamaulipas, estaban por arriba de las 80 camas; mientras que Baja California Sur, Coahuila, Sonora y el Distrito Federal había cifras de más del 90 por cada 100 mil habitantes.
En cuanto a consultorios ese mismo año, que son los datos más recientes con los que cuenta el INEGI, en la entidad había 56.2 consultorios por cada 100 mil habitantes, superior a los 50.9 que registraba la media nacional, pero por debajo de Baja California Sur, Colima, Distrito Federal, Durango, Guanajuato, Hidalgo, Nayarit, Tabasco y Zacatecas.
En quirófanos la media nacional era de 3.2 por cada 100 mil habitantes, Aguascalientes contaba con 3.7 mientras que el Distrito Federal tenía 7.0 siendo la más alta y el Estado de México 1.6 quirófanos resultando el más carente de este servicio. Sector que se encuentra descuidado por el gobernador Enrique Peña Nieto.
Los últimos indicadores institucionales del gobierno del estado de Aguascalientes señalan que, por cada mil habitantes hay 0.57 médicos generales y familiares, 1.08 médicos especialistas, 1.02 camas censables, 176.1 consultas de medicina de especialidad, 26.81 intervenciones quirúrgicas, diariamente se ofrecen 28.5 consultas generales por consultorio y el porcentaje de ocupación hospitalaria es de 75.6.
Para este año el Instituto de Salud del Estado cuenta con 896,557 mil pesos para invertir en el ramo de la salud con una partida especial para la construcción del nuevo hospital Miguel Hidalgo, que se prevé inicie sus funciones en el año 2010 y se estima que cuente con 200 camas, áreas de urgencias, terapia para adultos mayores, medicina interna, consulta externa de especialidades, imagenología, servicios generales, terapia pediátrica, quirófanos, laboratorio y hospitalización, oncología, así como una área administrativa, almacén general y talleres de mantenimiento y enseñanza. Todo ello con la finalidad de ofrecer mejores servicios de calidad para los aguascalentenses.
Si bien es cierto que tanto el gobierno federal como el estatal han realizado esfuerzos conjuntos para aumentar el nivel de vida de los aguascalentenses, también es cierto que no es suficiente.
Es indispensable, seguir trabajando en infraestructura material y personal médico, también es necesario crear conciencia e inculcar la cultura de la prevención, que cada habitante: hombres, mujeres, adolescentes, niños y niñas adoptemos mejores hábitos de alimentación, higiene y ejercicio para prevenir enfermedades. También es imperante asistir al médico periódicamente para detectar anomalías que puedan ser tratadas y de esta manera evitar problemas mayores para el paciente y su familia.
En 1920, Winslow señaló uno de los conceptos más aceptados, definía a la salud pública como la ciencia y el arte de prevenir las enfermedades, prolongar la vida y fomentar la salud y la eficiencia física mediante esfuerzos organizados de la comunidad para sanear el medio ambiente, controlar las infecciones de la comunidad y educar al individuo en cuanto a los principios de la higiene personal; organizar servicios médicos y de enfermería para el diagnóstico precoz y el tratamiento preventivo de las enfermedades, así como desarrollar la maquinaria social que le asegure a cada individuo de la comunidad un nivel de vida adecuado para el mantenimiento de la salud.
En ese entendido los gobiernos emanados de Acción Nacional han realizado diversos programas como el Seguro Popular con el propósito de mantener la salud del país y para muestra de ello, basta con recordar la manera eficaz con la que se ha hecho frente en el combate de la influenza A(H1N1); las diversas reformas legislativas y los presupuestos aprobados a favor de esta materia.
En esta legislatura se han logrado importantes reformas a la Ley de Salud que beneficiarán al pueblo de Aguascalientes, como los cuidados paliativos y próximamente la atención geriátrica, hemos avanzado pero falta mucho por hacer por este sector de la población de Aguascalientes.
