Los niños de San Francisco del Arenal que aprendieron a convertirse en animales dentro de su mente, ahora están saliendo del capullo luego de su Taller de las Mariposas, para presentar lo que aprendieron representando en una obra de teatro que fue el objetivo planteado desde un inicio y que ahora será posible por el interés de los pequeños en participar en una convocatoria hecha por el programa de Alas y Raíces a los niños para concursar, contó Iván de los Ángeles Gómez Peñalver, que es uno de los coordinadores de este grupo.
Este próximo 7, 8 y 9 de diciembre se realizarán la primera y segunda etapa de la selección de dónde deben quedar tres grupos de teatro, el primer lugar será el que representará al estado en el Festival Nacional de Teatro, que tiene como sede Pachuca, con el programa de Alas y Raíces. Ellos en particular, se animaron a participar porque finalmente este Taller de las Mariposas es un trabajo realizado desde marzo de este año y presentarse es una forma de que ellos puedan mostrar su trabajo en el escenario.
“Que con esto vean que todo el proceso que se estuvo llevando que
fue muy interesante, se concluye con esa presentación, que será
prácticamente el estreno”, comentó.
Este proceso de llevar el resultado de sus lecturas al teatro ha
sido un poco difícil para los niños porque ellos estaban más
familiarizados con el proceso lector y entonces las imágenes las tienen
en su cabeza pero les cuesta trabajo expresarlas, sacarlas, “darse
cuenta que el perro te dice esto y esto pero no, como que todavía no
concientizan que el perro también se puede mover, les hace falta
apropiarse de los textos y del significado de lo que dicen”.
En el proceso lector vieron el cuento, la historia, luego ellos lo
transcribieron con sus propias ideas, pero al momento de volverlo al
teatro se les ha dificultado encontrar la imagen para relacionar lo que
ya habían leído con la acción, son dos procesos muy diferentes y ellos
están apenas experimentando.
Incluso la falta de expresión se ve reflejada en el tiempo de
duración de la obra misma que es un poco más larga, pero ellos lo
acortan porque sus diálogos los dicen como si los estuvieran leyendo,
les hace falta ser totalmente conscientes del proceso de dramatización
en el que tienen que hablar más despacio, más alto, mover el cuerpo.
“Este proceso les sirve incluso para su propia vida, porque las cosas
que leemos incluso nos las podemos imaginar, nos las podemos creer y
las podemos vivir”.
El grupo de niños que va a representar la obra son doce, más de los
que iniciaron con el taller de lectura y esto ha sido muy bueno porque
en el proceso, se fueron integrando más pequeños de la comunidad que
tuvieron en días pasados una experiencia muy enriquecedora en un
encuentro con los padres de familia, quienes empezaron a ver los
resultados de las actividades que sus hijos estuvieron realizando
durante los sábados de todo este año.
“Los papás que no pudieron venir aquí al Pabellón Antonio Acevedo,
están yendo allá y están viendo los resultados de los niños e inclusive
en estos días hubo una plática porque ellos mismos les decían es que lo
están diciendo como si estuvieran leyendo, los mismos papás se dieron
cuenta”.
Los resultados del taller ya se dejan ver no sólo en las capacidades
artísticas de los niños sino incluso en su forma de hablar, de
relacionarse entre ellos mismos o con su familia o en los avances de la
escuela.
Ellos están a la expectativa de ver si pueden ganar, pero
independientemente de esto, la propuesta siguiente aunque no sea en
este año porque está ya por terminar, es hacer una temporada de
presentaciones, llevarlo sobre todo a los municipios y no sólo
presentarlo sino también explicarle al público todo el proceso que
vivieron los niños para llegar a este resultado.
