Este 2010, nos encontramos inmersos en el proyecto ciudadano que por sus dimensiones, alcances y trascendencia, es sin duda alguna, el proyecto de mayor importancia para quienes habitamos Aguascalientes. El proyecto se llama Proceso Electoral Local.
En éste, miles de ciudadanos, desde sus respectivas esferas competenciales han sido no sólo testigos, sino sujetos activos del desarrollo de cada una de las etapas del proceso, de las que sin temor a equivocarme, la Jornada Electoral a efectuarse el próximo 4 de julio, forma la parte medular.
Al estar conformado, el Estado Mexicano en un régimen Representativo Republicano y Federal, según lo precisado por el artículo 40 de nuestra Carta Magna, el voto, ejemplo por antonomasia de los derechos electorales del ciudadano, se constituye como la vía primigenia de elección de los gobernantes. Pero más allá del marco jurídico que regula al sufragio como un derecho y una obligación del ciudadano, detengámonos a reflexionar aunque sea por un momento… qué tipo de gobierno queremos para los próximos años. Las respuestas, que pueden resultar muchas y muy variadas, sin duda alguna, tendrán un punto en común: poder participar en su elección.
Hoy en Aguascalientes nos encontramos ante una oportunidad histórica, que no tuvieron quienes vieron a este país surgir a la vida independiente, la oportunidad que no poseen aquellos ciudadanos que viven en una monarquía o en una dictadura, o aquellos que son destinatarios de las normas de un régimen totalitario: la oportunidad de elegir a nuestros gobernantes, la oportunidad de votar. Es ese mismo derecho a decidir por el que los héroes que nos dieron patria (ahora que está de moda el Bicentenario), empeñaban sus vidas en grandes cruzadas de futuro incierto ese mismo derecho, es el que ahora tendremos este domingo, al alcance de una boleta sin revueltas, rebeliones ni revoluciones.
Dice un viejo adagio que las cosas se valoran por lo que cuestan, ahora que sabemos cuánto es que ha costado el poder emitir un voto en el marco de una elección ciudadanizada, ¿no es tiempo de valorarlo?
¿No será tiempo de valorar el esfuerzo de miles de ciudadanos por decidir el futuro de nuestro querido Aguascalientes por una vía edificante y democrática?
Qué sucedería si todos nos sumáramos a este esfuerzo ciudadano, si este 4 de julio nos despertáramos y, como si fuera un sueño tomado de las páginas del literato más idealista, nos encontráramos las casillas pletóricas de aguascalentenses votando, en paz, en calma, como efectivamente lo queremos.
Yo me pregunto, y le pregunto a usted, amigo lector, hasta dónde esta escena es un sueño, hasta dónde o hasta cuándo la podremos hacer realidad; este 4 de julio, tenemos la oportunidad histórica y el poder de transformar esto en una palpable realidad, hoy como siempre ha sido, depende de nosotros, como ciudadanos, sólo de nosotros, por ello amable y respetuosamente le digo: ¡ESTE 4 DE JULIO, TODOS A VOTAR!




