The Insolence of Office / ¿Ensayo creativo? WTF! - LJA Aguascalientes
13/12/2024

Hace poco mis alumnos y yo, en clase de crítica, revisamos algunas características que, consideramos, tienden a aparecer en la crítica de arte académica (a) y las comparamos con aquellas que, bajo el mismo marco, aparecen en la crítica de arte periodística (b). Las denominaciones pueden confundir así que usamos la terminología en lengua inglesa: academic criticism y journalistic criticism. (En lugar de dos adjetivos, uno. Cuando un adjetivo está en duda, pues ya lo decía Huidobro: si no da vida mata.)

Aclaradas las categorías, hicimos una tabla para ilustrar semejanzas y diferencias. Algunos de los elementos que sometimos a comparación fueron los siguientes: medio de difusión; referencias; estructura; vehículo. El resultado quedó así:

Medio de difusión: a: journals, revistas arbitradas; b: revistas, suplementos, periódicos. Referencias (esto causó un debate: ¿a partir de qué número son muchas o pocas?; sin embargo, llegamos a una impresión): a: muchas; b: pocas. Estructura: a: abstract, palabras clave, universidad de procedencia, introducción, desarrollo, conclusión; b: introducción, desarrollo; vehículo: a: ensayo; b: ensayo.

Alguien podrá decir “mmm, no siempre”: tendrá razón. Llegamos a esto solamente con una condición: no sentenciar nada. Las barreras, al menos teóricamente, no son tan evidentes. De ahí que hayamos hablado, exclusivamente, de tendencias. (En un sentido estricto ocurren dos cosas: existe la posibilidad de que las características de una aparezcan en la otra; ambas son críticas de arte y punto).

Podemos discutir esos detalles -y otros que no he compartido aquí-; sin embargo, hay uno en el cual podemos estar todos de acuerdo: el vehículo de cualquiera de las dos críticas es el ensayo.

El ensayo, como tema, nos llevó a otra discusión: ¿si el ensayo es un género literario, quienes lo practican son artistas? La respuesta: no necesariamente; sin embargo, sí que podemos decir que quien lo cultiva es un escritor (hay buenos y malos).

Ocurre que tenemos dentro de la categoría “artista”, a escritor, a director, a músico, etc.; pero una cosa no convierte en lo otro sólo por contacto. Ejemplo un tanto menso: esto es que un pintor, digamos, de casas, no es necesariamente un artista. Pasa lo mismo con el escritor. Explicado de otra forma: un escritor de manuales de electrodomésticos, no es necesariamente un artista. Mientras no haya, de por medio, un componente estético y una cierta autonomía, entonces, difícilmente, estaremos hablando de arte. Soy consciente de que es mucho más complicado que eso; pero creo que, para mi finalidad, con esto es suficiente. Así que nuestra nada meritoria conclusión, en materia de la ontología del ensayo (la payasada del término es mía), fue que, independientemente de las aspiraciones artísticas (finalmente esto lo juzga el lector cultivado, el crítico, la academia), el ensayo, forzosamente, es un género atravesado, entre otras cosas, por la inteligencia, por el ingenio, por la reflexión, por la creatividad. Decir menos del ensayo es una estupidez. Adjetivarlo, según el terreno que se esté pisando, puede arrastrar complicaciones: hemos visto dos ejemplos que, sin duda, prueban que una crítica, al ser ensayo, bien puede encajar en un lado o en otro o en ambos: las fronteras, vuelvo, no están tan definidas.

Pero hay algo peor: adjetivar una palabra con un detalle que la compone me parece, rotundamente, un acto imbécil. Ejemplo: emoción emocionante; cine de imágenes; freeware gratuito; ensayo creativo.

El FONCA publicó sus resultados hace unos cuantos días. Ocurrió lo lógico: unos sonrieron otros se deprimieron. La fortuna tiene ese poder.


Debido a que estoy interesado, por ahora, en el ensayo, revisé las categorías: poesía, novela, cuento, ensayo creativo. No había reparado en ese adjetivo tan curioso. Motivo por el cual es urgente preguntar, creativamente, ¿qué coño es un ensayo creativo?

Don FONCA dice: “Ensayo creativo incluye todas las manifestaciones literarias de corte ensayístico que sin seguir parámetros académicos sino creativos aborden el estudio de temas tan variados como la literatura, el arte, la ciencia, la vida cotidiana y el humanismo en general.” [sic] Habría que preguntar dos cosas a los escritores que redactan esas tonterías: ¿el ensayo académico no es creativo?; ¿se prohíbe utilizar características que tienden a aparecer en el ensayo académico en el ensayo “creativo”? WTF?

Me atrevo a llevar el asunto a un límite: ¿qué pasaría si un escritor se decidiera por crear un ensayo con un aparato crítico basado en la academia, cuyas fuentes, borgianamente, fueran inventadas? ¿Estaríamos ante un ensayo mentadamente creativo? Bollocks. ¿Cuál es la frontera? Hemos visto que es complicadísimo sentenciar. Ellos lo hacen, ¿bajo qué argumento?

Un ensayo, eso sí, toma un objeto, un momento, una persona, una obra, una colección, etc., y lo convierte, por unas cuantas páginas, en el centro de atención de todo su discurso. Las palabras sirven para orbitar el interés. Y para escribirlo se necesita, nada más obvio, entre otras cualidades, creatividad.

Es evidente que la recepción de un ensayo no siempre va a tener comentarios favorables en cuanto a la capacidad creativa del escritor; sin embargo, si se está convocando a una beca para escritores (artistas) se entiende, lógicamente, que el ensayo debe tener la pretensión anteriormente señalada. No importa el tema porque en literatura interesa que el escritor tenga un empleo en condiciones de la lengua: ante todo escribir bien (Buffon: bien écrire c’est à la fois bien sentir, bien penser et bien dire). Ensayo nomás hay uno: está bien escrito o no es. (Sí, como en la poesía, como en el cuento).

Si lo que FONCA está tratanto de decir, al discriminar, es que quiere trabajos bien hechos, entonces, o todos coludos o todos rabones: poesía creativa, novela creativa, cuento creativo, ensayo creativo; eso o una propuesta que me parece un poquito más sensata: poesía, novela, cuento, ensayo. Recordemos al poeta chileno.

 

[email protected]

 


Show Full Content
Previous Mantequilla extra / Cuéntame una de Statham
Next De política, una opinión / La validación de la elección presidencial…

1 thought on “The Insolence of Office / ¿Ensayo creativo? WTF!

Comments are closed.

Close

NEXT STORY

Close

Club Necaxa entrega recolección de tapas de plástico a Fundación Canica

15/02/2021
Close