Quién sí y quién no. Habrá que guardar la foto de la reunión del PRI del domingo, ahí y no en otra parte está la crema y nata del priísmo de la tierra de la gente buena. En la imagen no se trasluce, pero los tricolores posaron para la foto después de una encerrona en la que se subrayó, una y otra vez, la idea de que quien no colabore con el nado de muertito que está dando el partido; es decir, quien insista en exhibir sus aspiraciones electorales antes de la toma de protesta de Enrique Peña Nieto, se quedará chiflando en la loma y sin el apoyo del partido.
Por supuesto, no faltará quién quiera adjudicar otros motivos a la reunión y con la idea de quien pega primero, pega dos veces, tergiverse un poco lo que sucedió el día de ayer.
Cada quién cuenta cómo le fue en la feria. Más que una reunión en torno a Carlos Lozano de la Torre, hay quien dice que la reunión del priísmo de Aguascalientes fue con el delegado del Comité Ejecutivo Nacional, Jesús María Rodríguez Hernández, ex diputado federal queretano. La versión oficial dice que el delegado vino a hablar del triunfo de Enrique Peña Nieto en Aguascalientes, que destacó la mejora en seguridad pública, empleo, educación e indicadores económicos, de la entidad a partir del inicio de la administración de Lozano de la Torre.
Dijo el delegado del CEN priísta que las oficinas centrales del tricolor, a través de su persona, se mantendrían atentas a las necesidades del priísmo local, para “escuchar y atender a todo aquel que se acerque a realizarle planeamientos personales o de partido y encauzarlos debidamente”. Eso sí, subrayó que “será la disciplina y la institucionalidad de la clase política la base para lograr el triunfo en las elecciones del 7 de julio del 2013”.
Otras voces señalan que Rodríguez Hernández decepcionó a los asistentes con su mensaje porque el centro de su discurso fue meter freno a los suspirantes con la consigna de que el único banderazo válido será dado por él mismo y será hasta enero próximo.
Caravana con sombrero ajeno. Quien no pierde oportunidad de intentar dar machetazo a caballo de espadas es Guadalupe Ortega, pues en su versión de la reunión, ante los priístas reunidos en la Cava Pedro Domecq, el gobernador fue a felicitarlo por su trabajo como dirigente estatal del tricolor, que porque Ortega lo ha hecho más que bien tanto con las bases como las dirigencias municipales, diputados y presidentes municipales, como quien dice, sin Lupe se cae todo, ¿de veras?
En la versión de Lupe Ortega, fue él y no otro quien le dijo a los priístas el huevo y quién lo puso, porque aplicó a los suspirante un severo: no se reborujen, o en términos salinistas: no se hagan bolas. Así lo transmitió en el comunicado oficial: “Que nadie se confunda, el trabajo conjunto de todos ellos es nuestra enorme ventaja, nuestra imagen y nuestra fortaleza. En el PRI cabemos todos; el PRI tiene y tendrá siempre las puertas abiertas para todos”. Los convocó a que no se distraigan porque la atención debe estar centrada en el Segundo Informe de Carlos Lozano de la Torre y la toma de posesión de Enrique Peña Nieto “ésta es nuestra prioridad, después del 1 de Diciembre, los tiempos, los objetivos y las estrategias serán otros”.
Regresando a la imagen. Hay quienes elaborarán sus propias listas para ir descontando nombres de de la lista #YoSoySupirante32 de Lupe Ortega, para ello, le contábamos ayer, destacan dos aspectos importantes a la hora de analizar a los posibles candidatos priístas. La primera es que no genere fricciones entre el lozanismo y el lorenismo; la segunda es que retrate bien.
No es difícil creer en la existencia de estas investigaciones si se considera la posibilidad de que el PRI haya aprendido de sus errores. Elegir un personaje que no meta en líos a los dos grupos más evidentes y que al mismo tiempo conecte, físicamente, con la gente, sería la reacción normal tras el análisis a las batallas perdidas por Isidoro Armendáriz y Alfredo González González, y la búsqueda de quien pueda darle pelea al “carisma” de Felipe de Jesús González Ramírez.
Con ese rasero, hay quienes dejan la #YoSoySupirante32 en sólo cuatro posibles candidatos para la alcaldía de la capital (estricto orden alfabético): Gustavo Granados Corzo, Miguel Ángel Juárez Frías, Luis Fernando Muñoz y Juan Carlos Rodríguez; ni modo Francisco Guel Macías, Enrique Juárez Ramírez y Roberto Tavarez Medina, a conformarse con una diputación, mientras que a Óscar López Velarde Vega, se le postula para que se vaya al gabinete de Peña Nieto, al frente de la Secretaría de Desarrollo Urbano, Ordenamiento del Territorio y Vivienda que tanto se promovió durante el reciente Encuentro Nacional sobre Ciudades del Futuro.
No suena mal este método de eliminación, de selección pues, en que se busca ante todo la unidad de las filas priístas. Habrá que ir haciendo el recuento del trabajo partidista de los candidatos posibles, y en esas cuentas, quienes salen más que aprobados y reduce la lista a dos, son Granados Corzo y Juan Carlos Rodríguez, nomás hay que checar cómo le fue al primero en su distrito, mientras que al segundo no le vendría mal que recordara el trabajo que realizó con la estructura en las pasadas elecciones.
Para finalizar con la foto. No se equivoca, no está, la gran ausente en la reunión fue la alcaldesa Lorena Martínez, pero antes de correr rumores, todo indica que faltó al encuentro por motivos de índole familiar.
