Son las 00:03 horas, me encuentro en el cruce de avenida Ojocaliente y el bulevar Guadalupano, punto en el que comienzo a caminar sobre la citada avenida, de norte a sur, y observo que pasa la patrulla número 325-B1, sobre bulevar Guadalupano, a un lado mío, camina un pepenador, señor de unos 70 años de edad, a él le acompaña solamente su bicicleta, y un gancho, con el que supongo, saca los materiales de los contenedores.
Cabe hacer mención sobre mi vestimenta, un pantalón roto, unos tenis muy viejos, una sudadera en las mismas condiciones y encima de ésta, una cotorina (chamarra hecha de cobija sanjuanera) que compré en un tianguis en cinco pesos. Camino por el camellón que es sumamente ancho, como de unos 15 o 20 metros, lugar en el que me encuentro a una persona, la cual viste ropa deportiva, quien se encuentra hablando por celular, me observa con mucha atención, a tal punto que hasta se gira, no deja de observarme, pero tampoco de hablar por el celular, se da vuelta y comienza a carcajearse.
Sigo caminando, hace mucho frío, ahora lo hago entre una zona sumamente oscura, me encuentro, a mi lado izquierdo (oriente) la colonia Rodolfo Landeros, lugar en el que se ven a lo lejos algunos jóvenes y sus perros, a mi lado derecho (poniente), el fraccionamiento Colinas de Oriente, todo un contraste, casas lejanas a la decadencia de las que se encuentran a unos metros, me parece que esta línea por la que camino hace una gran diferencia.
00:10 horas. Llego al cruce de avenida Ojocaliente y Rodolfo Landeros, me encuentro a unos 500 metros de la Línea Verde, en esta otra línea que se encuentra trazada de manera totalmente paralela; me viene una idea a la mente, esta arteria por la que me dirijo tiene más de 25 años y el ambiente que se respira es pesado, pues llena de temor la atmósfera, no ha vuelto a pasar una sola patrulla, la soledad y la oscuridad son abrumadoras, condiciones distintas a las que se viven en la Línea Verde al caminar de noche.
Continúo, los vehículos solos en las calles, totalmente a merced de quienes busquen obtener algún artículo de éstos, una bolsa de cemento industrial tirada en el suelo, dos jóvenes que pasan me sacan la vuelta, no son cholos, por el contrario, parece que son estudiantes, alegres juguetean entre ellos, no me ven a la cara, pero sonríen.
Paso a un costado de la subestación de la CFE, la cual se encuentra adornada por las singulares pintas que hacen algunas personas, lo mismo que ha sucedido con la infraestructura urbana. Sólo se escucha el sonido de la electricidad que viaja por los cables de alta tensión de las torres que se encuentran aquí, así como ladridos de algunos perros. Una persona cruza en su bicicleta, al parecer un trabajador que regresa de sus labores, la oscuridad es hasta cierto punto abrumadora.
00:12 horas. Pasa frente a mí una unidad de bomberos, para ser precisos, la UE-21, con placas de circulación AG299 B1, es curioso, pero sobre todo irónico, ya que no ha pasado una sola patrulla de algún cuerpo de seguridad en lo que llevo de camino, y ahora pasan los bomberos, pero me surge la duda, ¿podrían intervenir en caso de que algún ciudadano requiriera de la ayuda de los cuerpos de Seguridad Pública? Continúo caminando, los taxis vacíos me pitan, creen que puedo requerir de su servicio, lo hacen a pesar de mi aspecto.
00:16 horas. Llego al cruce de avenida Ojocaliente y Miguel Ángel Barberena, lugar en el que vuelvo a pensar en las grandes dimensiones de la Línea Verde, pero a la vez me pregunto el porqué del abandono de esta otra línea, misma que sirve para que cada día circulen miles de vehículos y personas, y que conecta los destinos de miles de habitantes de Aguascalientes, que de maneras diversas lo consiguen.
00:18 horas. Una persona que lava su cochera me observa, no me quita la mirada de encima, hasta cierto punto me reta. Cierra su portón, a unos metros un autolavado, algunos niños dentro de él, de aproximadamente unos 11 años, también hay algunos adolescentes, secando algunas franelas, a pesar de que no hay un solo automóvil recibiendo el servicio, el frío es intenso, pero los jóvenes, a pesar de las tristes condiciones, sonríen.
00:20 horas. Llego al cruce de la Avenida Ojocaliente y Esfuerzo Nacional, punto en que me vuelvo a encontrar a la unidad de bomberos, se me hace cómico, por el nivel de ironía, pues no he vuelto a encontrar una sola unidad de policía en el tiempo que llevo de recorrido. Ahora llego al fraccionamiento Fidel Velázquez, lugar en que comienza a haber un poco más de luz. A mi lado derecho, un parque recreativo, sin paredes, completamente abierto, el cual parece estar en el abandono, no por la hora, sino por las condiciones que mantiene su infraestructura. Frente a esta zona un anuncio de grandes dimensiones “no más niños con sobrepeso, protejamos a los nuestros” nuevamente las interrogantes.
00:26 horas. Veo a la primera patrulla en lo que llevo de este rumbo; es la 178-B1, pasa a gran velocidad, a unos 80 kilómetros por hora. Inclusive vuela un tope que había a su paso, sin luces ni torreta encendida, ni anuncio alguno sobre lo apresurado de su carrera ¿es estrategia, es emergencia?, ¡simplemente no lo entiendo!
00:27 horas. Algunas personas están trabajando al interior de una panadería. Doy unos pasos, dentro de una camioneta, una mujer al volante recibe reclamos de un hombre que se encuentra a su costado, son varias las cervezas que tienen en el tablero, discuten fuertemente, a la vez pasa la patrulla 513-B1, a un costado de los contrincantes, misma que lo hace a muy baja velocidad, no se percata o no le interesa lo que sucede. El guardián no se detiene, y la discusión continúa.
00:29 horas. Llego al cruce de avenida Ojocaliente y Alameda, lugar en el que pasa la unidad 309-B1, viene sobre Alameda del oriente, cruza y se dirige hacia el poniente. Inicia el fraccionamiento Ojocaliente I, zona en la que se ve más gente, más comercios y más luces, el ambiente es otro.
00:30 horas. Vuelvo a encontrar a la patrulla 513-B1, ahora va en sentido contrario al que lo hacia, va por avenida Ojocaliente y gira en la calle Los Negritos, y se pierde. Continúa circulando lento, más taxis solos, uno detrás del otro.
00:35 horas. Paso a un lado del templo del Ojocaliente I, sólo se nota una soledad, llega a la esquina de este punto una unidad de transporte de personal, bajan un par de trabajadores.
00:37 horas. Llego a la unidad deportiva de este fraccionamiento. Me llama la atención que en frente se encuentre en completo abandono lo que un día funcionó como módulo de policía, mismo que ahora es utilizado por una persona que se dedica a la venta de hot dogs.
00:41 horas. Pasa una persona que pasea a su perro, más taxis solos, camino y a unos metros una mujer baja de su vehículo, me observa detenidamente, activa la alarma de su auto, voltea a verme nuevamente y la vuelve a activar, para finalmente ingresar a su domicilio.
00:48 horas. Estoy en el cruce de avenida Ojocaliente y San Francisco de los Viveros. Me encuentro una patrulla, a lo lejos los policías me observan, no alcanzo a ver el número de la unidad, realmente lo único que quiero es que se acerquen, que me aborden, que se interesen por saber qué es lo que hago, o a qué se debe mi extraño caminar. Parece que se van a regresar, pero no, finalmente no lo hacen.
00:57 horas. Me encuentro frente al domicilio en el que lamentablemente asesinaron a una persona, al parecer por querer robarle en su propia casa, el domicilio se encuentra en completo abandono. Pasa una patrulla, no veo su número, pero ni siquiera me voltea a ver, continuo caminando, un taxi me pita, vuelvo a encontrar a la patrulla, me ve pero no me dice nada.
1:05 horas. Llego al cruce de avenida Ojocaliente y avenida Tecnológico, me encuentro a un costado de las instalaciones del SNTE, al frente el Instituto de Educación de Aguascalientes, este lugar se diferencia por la gran afluencia de vehículos, el tránsito de la gente, punto en el que culmina mi caminata, después de haber recorrido estos más de 3 kilómetros de avenida Ojocaliente, vía en la que los contrastes y los climas son variados y los cuales revelan varias situaciones que se viven de forma cotidiana en este sector.
