- El calificativo de “traidora” lo ha ganado por su omisa representación: Laura Ramírez Pérez
- Ubica como agresor de los manifestantes y principal beneficiado del SNTE a Rafael Diosdado
No merecen más que reconocimiento los maestros que tuvieron el valor de manifestarse el pasado 1 de mayo ante las autoridades gubernamentales, y ante las de la Sección I del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), pues con ello se muestra que las cosas dentro del magisterio no se encuentran bien, y que existen diversas inconformidades de niveles nada menores, lo que no debe minimizarse, al contrario, es una señal de que el foco no es de color amarillo, sino rojo.
Laura Ramírez Pérez, secretaria del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Educación de México (SITEM) en el estado, sostuvo que este acto de los maestros es algo que se les debe reconocer ampliamente, no importa que hayan sido pocos, ya que es evidente que no todos se atreven a manifestarse, debido a las represalias que pueden recibir en su contra.
“Yo encuentro que no hay foco amarillo como lo señaló el gobernador Carlos Lozano de la Torre, sino que es un foco rojo precisamente para la Sección”, ya que para la líder del SITEM las diversas autoridades han perdido conciencia de que ellos son simples funcionarios, quienes viven de un sueldo que erogan los ciudadanos, y en lo que compete a los maestros, lo mismo está sucediendo, pues las autoridades del SNTE sólo están concentradas en la defensa de sus intereses, pero no de sus agremiados y reiteró que lamentablemente no todos tienen el valor de manifestarlo.
La omisión que ha mostrado Juana Alicia Espinosa de los Monteros Ortiz, secretaria de la sección I del SNTE, en cuanto a la representación de los trabajadores de la educación, ha hecho que se utilice en su contra el calificativo de “traidora”, el cual se ha ganado al demostrar una y otra vez que el SNTE es el único sindicato que está atentando en contra de los intereses de los agremiados.
“El saco se lo debe de poner a quien le quede, porque en un momento no sólo es ella, sino también el maestro Rafael Diosdado, quien se atrevió a quitarle una manta a uno de los manifestantes, y pues él ha sido uno de los principales beneficiados del SNTE, ya que tiene más de 20 años cubriendo una comisión sindical y en la que no representa a sus agremiados, pero sí tiene el atrevimiento de poder intimidar a los que se manifiestan en contra de sus actitudes”.
Más que mostrar su músculo en el desfile, el SNTE dio una muestra de los niveles de intimidación que ejerce sobre los trabajadores, pues de hecho, muchos de ellos, le manifestaron a Ramírez Pérez que estaban inconformes, ya que les iban a pasar lista tanto a la entrada como a la salida del evento para saber si asistieron al mismo.