- El Gobierno del Estado deberá entregar el predio en las condiciones en las que se encontraba cuando fue expropiado
- El lienzo no podrá usarse para la charrería; asociaciones de charros muestran interés de crear otro espacio o integrarse a áreas alternas
El Gobierno del Estado deberá entregar el predio, correspondiente a once mil metros cuadrados dentro de la Villa Charra, a su dueño Mario Trillo en las condiciones en las que se encontraba cuando fue expropiado, esto luego de la resolución recurrida del juez primero de distrito, Óscar Mauricio Maycott Morales, dándole cierre a un juicio de 33 años de procesos dilatorios.
El secretario de Gobierno, Sergio Reynoso Talamantes informó que el terreno ya fue propiamente delimitado y luego de recibir la notificación el día de ayer, se cuenta con tres días para dar cumplimiento a la sentencia, a fin de que Mario Trillo reciba el terreno en las mismas condiciones en que se encontraba cuando fue despojado del primer dueño, su padre.
“La Corte ha determinado de forma muy puntual que se le regrese al señor la propiedad que le representan once mil metros cuadrados”, Reynoso Talamantes aclaró que los once mil metros cuadrados no son la totalidad de la Villa Charra sino menos de la tercera parte de todo el inmueble, en donde sólo se encuentra una capilla, corrales y caballerizas, las cuales deberán ser demolidas; lo que refiere al salón y al lienzo continúan bajo el resguardo del Gobierno del Estado, por lo que no se inhabilitará el uso del terreno.
“El Gobierno del Estado seguirá usando la mayor parte del lienzo y las áreas que corresponden y que pueden ser utilizadas hasta para los efectos de la propia Feria Nacional de San Marcos, entonces se seguirán utilizando”, sin embargo no será posible su uso para efectos de la charrería, al respecto las asociaciones de charros se han sumado al interés de crear otro espacio o integrarse a áreas alternas en mejores condiciones.
Cabe mencionar que la propiedad legalmente adquirida por el simple transcurso del tiempo fue expropiada durante la administración del gobernador Refugio Esparza Reyes en el año 1980, sin embargo la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia intervino a favor del propietario, situación que fue heredada durante varios sexenios. El 18 de septiembre del 2013, el Gobierno del Estado entregó el predio, sin embargo no fue aceptado por Mario Trillo pues no se encontraba en las condiciones establecidas por la ley.
Reynoso Talamantes negó que el decreto de restitución se hubiera aprobado porque el inmueble no cumplía con el objetivo de beneficio social como parques o jardines públicos por el cual había sido privado, ya que dijo, siempre estuvo estipulado que sería utilizado para fines del deporte de charrería. Aclaró que se estableció en función del perjuicio ocasionado al dueño por la no utilización del área.
A decir del secretario de Gobierno, no hubo cabida a compensación pues el propietario solicitaba un valor superior al comercial y catastral, “estas personas han estado buscando la posibilidad de un acercamiento en razón de una compensación que no corresponde a la situación de los valores reales que tienen esas propiedades, como para poder pensar en que se pudiesen adquirir para que fuesen patrimonio del Gobierno del Estado”.
Foto: Gilberto Barrón
