- La obra trilingüe, escrita en español, inglés y japonés, forma parte de la colección Ediciones Extraordinarias
- Esta edición muestra un recorrido por las diversas temáticas abordadas por quien es considerado “el creador de la gráfica popular mexicana”
José Guadalupe Posada. Edición conmemorativa, obra preparada para recordar en su centenario luctuso, al célebre grabador mexicano creador de La Catrina, coedición de la Dirección General de Publicaciones (DGP) del Conaculta y el Instituto Cultural de Aguascalientes (ICA), se presentó en la XXXV Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería.
Conformada por alrededor de 400 imágenes y diversos ensayos de especialistas como Mercurio López, Helia Emma Bonilla Reyna, Agustín Sánchez, González y Rafael Barajas El Fisgón, entre otros, la obra trilingüe, escrita en español, inglés y japonés, forma parte de la colección Ediciones Extraordinarias.
Siempre se ha especulado sobre la cantidad de grabados realizados por José Guadalupe Posada (Aguascalientes, 1852 – Ciudad de México, 1913), sin embargo, así sean diez mil, 20 mil o más, la obra de Posada es incontenible y se desborda como un torrente imparable de genialidad, para ser conocida por las presentes y futuras generaciones.
Si bien La Calavera Garbancera, renombrada por Diego Rivera como La Catrina, es la obra más reconocida del artista mexicano, esta edición conmemorativa muestra un recorrido por las diversas temáticas abordadas por quien es considerado “el creador de la gráfica popular mexicana”.
Su obra abarca episodios de la vida nacional, personajes históricos, estampas de la vida cotidiana, juegos de mesa, catástrofes naturales, supersticiones, leyendas urbanas, creencias religiosas, programas de teatro, hojas volantes, la crítica social de su tiempo y, las más célebres de todas sus creaciones, sus calaveras que forman parte del folclor mexicano.
La primera y más decisiva revaloración del legado de Posada tuvo lugar en el seno del Taller de la Gráfica Popular, entre las décadas de 1940 y 1950. Ocurrió de dos maneras: como reconocimiento directo a su singular talento como grabador y al reciclar muchas de sus imágenes como armas de crítica social.
En los sesenta fue objeto de una atención más detenida y Vicente Rojo realizó una carpeta, la primera, con sus grabados, y en los ochenta se editaron un par de libros destinados a los niños con sus dibujos y grabados.
“Los reconocimientos y las referencias a la obra gráfica de Posada no han cesado hasta el día de hoy, como lo demuestra esta edición conmemorativa en la que el Conaculta se enorgullece de participar junto con el Instituto Cultural de Aguascalientes.
“Los ecos de Posada son nuestro presente, su ubicación en el tiempo se resuelve con su presencia constante, permanente, en nuestro horizonte visual y, también, con la fiel reminiscencia, cual intenso sueño poblado de calacas y ecos, de una parte de nuestra historia moderna”, escribió Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Conaculta, en su texto introductorio al libro.
José Guadalupe Posada. Edición conmemorativa se presentó en el Auditorio Bernardo Quintana del Palacio de Minería, con los comentarios de Mercurio López, Agustín Sánchez, Helia Bonilla y Alberto Cue.
Con información de Conaculta
