No, estimado lector, no me equivoqué, este jueves decidí titular el tema de Imágenes y Textos como “Viento en proa” no en popa. Esa frase (“viento en popa”) tiene su origen por la manera en que las embarcaciones que carecen de motor se desplazan en el agua gracias a las velas; si el viento pega con fuerza por detrás de la barcaza, en “popa” entonces los navíos se desplazan con mayor facilidad y velocidad, no así cuando el viento pega en la “proa”.
En la historia oficial que le voy a contar todo marcha bien, vamos viento en popa o por lo menos para los habitantes de la realeza del reino de los ciegos.
Primero la distracción, no dejaremos que conozcan la proa, aunque todos estemos sufriendo los vientos que azotan en esa parte de la embarcación; para eso en el reino tenemos bufones, artistas y deportistas, líderes como Robin Hood que se han dejando atrapar, muchos juglares que han vendido su reputación con tal de asegurar la estirpe de su apellido y sabios que defienden el conocimiento sin cuestionar su origen.
Pero la realeza del reino de los ciego se pasó, mire que las mujeres del reino, es decir la reina y la princesa, tomarse fotos en el palacio real y difundirlas con los juglares, hasta de mal gusto es ¿no cree? Lo bueno es que en naciones civilizadas como la nuestra no pasan tales barbaridades, le sigo contando del viento en proa que azota al reino de los ciegos. Total que la reina se salió con la suya, dicen que años atrás ella fue parte del gran circo, a los que el pueblo les llaman artistas, esa carpa que se llena la boca de orgullo cuando dice que hacen nuestros sueños realidad y organizan concursos para que podamos compartir una cena “romántica” con el bufón de moda o la artista que además de bonita, canta, baila, defiende alguna causa social y se hace acreedora a discos de oro y estatuillas prestigiadas.
Por si fuera poco, los nobles guerreros que han regresado con la derrota en las manos también son utilizados para distraernos de todo mal. El líder guerrero, carismático y controvertido da su versión de la batalla y es aclamado por el reino de los ciegos, los juglares, aquel domingo cuando todo parecía indicar que los guerreros tenían dominado al dragón naranja, se dedicaron a elogiar, a elucubrar sobre el futuro de dichos envalentados seres, a tal grado que contagiaron a los mismísimos guerreros quienes cayeron en un estado aletargado y despertaron al dragón herido quien tomó fuerza para comerse de un bocado a estos pobres; la reacción fue tardía de ambos, los guerreros ya no pudieron hacer nada y los juglares cambiaron su discurso, sacaron los clavos y crucificaron a todos quienes ellos consideraron responsables del fracaso; volubles los juglares, sí señor.
Y mientras esto ocurría, de manera simultánea ¿qué cree que pasó? Que agarran a Robin Hood con todo y el pequeño Juan, hasta los guardias del reino se tomaron la ya clásica “selfie” del recuerdo con tan importante personaje.
Yo pensé que ese Robin sí era de verdad, que no se iba a prestar a distraer a los habitantes del reino de los ciegos; es claro que su captura obedece a muchas razones de peso que no tenemos por qué conocer según el reino, pero eso de encontrarle objetos que no tienen sentido…
Total que nuestro Robin cayó, ya se encuentra en el calabozo, uno menos en la cuenta de buscados por el reino, ahora tendremos que hacer audiciones para el nuevo líder social que acapare los reflectores y cause salpullido controlado al rey para que cuando se requiera, se deje atrapar y cause un impacto “juglático” que distraiga la atención de los habitantes de ya sabe cuál reino.
En la gran urbe del reino tienen problemas con la emisión de contaminantes que sus vehículos generan, eso orilló a tomar medidas drásticas en el uso de sus carruajes, si sus caballos son de más de 15 años entonces se verán limitados al uso de éstos, la pregunta es ¿A qué orillan a los habitantes del reino de los ciegos? A endeudarse con la compra de carruajes nuevos, que no contrarrestará la emisión de contaminantes y sí incrementará el parque vehicular de esa mega ciudad. ¿No le suena a querer detonar el caído consumo local en la industria automotriz?
Pero la cereza en el pastel real es la discusión que se generó debido a la aprobación de las reformas secundarias en materia de telecomunicaciones. Unos juglares dicen que benefició a las dos cadenas de televisoras que operan actualmente en el reino y los especialista en la materia, los que están a favor de ésta, la defienden con singular fidelidad.
Es sabido por casitodos los pobladores que los juglares del ojo amarillo con naranja están alineados desde su génesis con los reyes del reino de los ciegos y que entre ellos se apoyan cuando es necesario, ahora es el caso, con el poder (literal) de un par de palabras los de amarillo y naranja han garantizado su permanencia como monopolio “juglático” en este reino.
Sector y servicio. “Se determina preponderante en los sectores de radiodifusión y de telecomunicaciones, será preponderante el que tenga una participación nacional en la prestación de servicios de radiodifusión o telecomunicaciones mayor al 50 por ciento y las obligaciones impuestas se extinguirán cuando exista la competencia efectiva en el mercado que se trate”. Eso quiere decir que por “sector” los del ojo amarillo con naranja no son preponderantes en televisión abierta ni de paga.
Con esto el reino está salvaguardando la integridad del mismo, garantiza que la información que se genere sea supervisada y avalada por ellos, mantienen la censura “juglática” entre sus habitantes y permite seguir teniendo el control del reino de los ciegos. Le digo que es cuestión de enfoques, viento en popa para el reino, viento en proa para los poco tuertos que habitaban el reino.
Twitter: @ericazocar




