- Se inaugura el día de hoy la exposición en el Museo de Aguascalientes
- Esta presentación trae hasta Aguascalientes una de las facetas más desconocidas de la genial pintora surrealista
Este miércoles 6 a las 20:00 horas en el Museo de Aguascalientes tendrá lugar la inauguración de la exposición El Dibbuk de Leonora Carrington.
Con gabardinas largas y emplumadas, sombreros y botas puntiagudas, Leonora Carrington (Lancashire, 1917-Ciudad de México, 2011) vistió a los personajes de la puesta en escena de El Dybbuk, que se montó en Nueva York a inicios de la década de los 70.
La muestra El Dibbuk de Leonora Carrington consiste en una serie de once litografías que pertenecen al coleccionista Jaime Sommer, quien desde 1985 comenzó a reunir los diseños que tras el montaje en Nueva York se habían dispersado en diferentes acervos.
Es una serie de litografías muy interesante porque Leonora no crea los personajes, éstos provienen de la literatura y aun así logra darles una personalidad muy particular con su imaginación, con su estética surrealista. Luego de que Carrington hiciera los diseños de la puesta en escena, los artistas gráficos Luis y Lea Remba pasaron los trazos de la pintora a la técnica de litografía a través del Taller de Gráfica Popular, en 1974, en un rescate de estos dibujos efímeros, que ahora tiene un costo aproximado de 40 mil pesos cada uno.
Dybbuk es una palabra que proviene del hebreo y significa adherirse, que en la cultura judía explicaba cómo el alma de un muerto deseaba entrar al cuerpo de alguien más. Shloime Anski, en la novela, cuenta la historia de una joven poseída por un dybbuk la noche de su boda y los rituales para poder rescatarla.
Escrita en 1912, El Dybbuk es considerada una de las obras indispensables para entender la historia del teatro judío, pues además de la ficción, en realidad documenta la cultura judía a inicios de siglo. La historia se desarrolla en Polonia, en 1880, y, a partir del relato de amor entre Lea y Hanna, describe costumbres, ritos y creencias. A ello se suma el trazo ilusionista de Carrington, quien propuso ropajes largos, ostentosos, de colores vivos que se fusionan con botines y pantalones de color para contrastar con el rostro alargado de los personajes; lo mismo para los jueces y el rabino que para la novia y el “alma errante”.
Con información del Instituto Cultural de Aguascalientes




