- Investigación de Alex Covarrubias establece la disparidad entre los salarios de la industria automotriz instalada en el país
- En la Nissan de Cuernavaca el salario promedio diario de un trabajador es de 412.9 pesos, mientras que en Aguascalientes es de 225.42
Aguascalientes se encuentra entre los estados con los salarios más bajos dentro del sector automotriz instalado en México, afirmó Jesús Ramírez Ramírez, secretario general de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM) en Aguascalientes, quien se basó en un estudio dado a conocer por el investigador Alex Covarrubias, durante el desarrollo del Seminario de la Industria Automotriz, donde, entre otras cosas, se calificó al país como “el China de occidente”, basándose en las condiciones salariales y los mínimos costos de producción.
El dirigente de la CROM en el estado, hizo mención al comparativo de los salarios dentro del sector automotriz en el país y contrastó con las instalaciones de Nissan Cuernavaca, donde los trabajadores reciben un salario promedio diario de 412.9 pesos, el más alto en el país, mientras que la misma empresa en Aguascalientes paga a sus empleados un salario promedio diario de 225.42 pesos. Señaló que resulta un contrasentido ya que ambos son mano de obra calificada, contratados para las mismas funciones, considerándolo una dispersión abismal, tomando en cuenta que los costos laborales son los más bajos respecto a otros países.
Explicó que en estados como San Luis Potosí, la General Motors paga un salario promedio diario de 217 pesos, mientras que en Ramos Arizpe, Coahuila, la misma empresa paga 269 pesos diarios en promedio, pero en ciudades como Toluca, General Motors paga hasta 321 pesos diarios.
Además, aseguró que tal y como lo demuestra la investigación de Covarrubias, Aguascalientes no sólo está entre los menores salarios del sector, sino que además muestra una tendencia a la baja respecto años anteriores en lo que se refiere a los aumentos anuales.
Ramírez Ramírez aseveró que los principales responsables de dicha diferencia son el gobierno mexicano y los sindicatos. Estos últimos, dijo, son incapaces de buscar beneficios para sus trabajadores, siendo clara la diferencia entre liderazgos sindicales como el de Nissan Cuernavaca con los de Aguascalientes, producto de una falta de democracia interna incapaz de contrarrestar los acuerdos entre Nissan y sus filiales que establecen un aumento salarial de 3.5% cada año.
En contraste, estableció que según la consultora Stratford, México se encuentra entre los lugares con menores costos de producción dentro de los principales 18 países del ramo, donde se gasta menos en salarios, al representar 3.95 dólares por hora para los obreros, mientras que en Taiwán es de 7.5 dólares; Hungría, 9 dólares; Brasil, 11 dólares; Alemania, 52 dólares; y Bélgica, Austria y Canadá, con costos que oscilan en los 30 y 40 dólares. Y por si eso fuera poco, las proyecciones indican que en México, de costar 3.95 dólares pasará a costar 3.6 el próximo año.
Criticó que la clase política pugne porque los sindicatos y los gobiernos se adapten a las demandas de las empresas, y respondió que debe existir un balance entre los tres actores y los trabajadores. Descartó también las amenazas de los gobernantes de la posible fuga de las trasnacionales a otros países, argumentando que jamás lo harán por la rentabilidad que les representa establecerse en México y advirtió que, por el contrario, seguirán llegando más empresas.
Sobre la precarización de los salarios respecto otros países, Jesús Ramírez comparó el crecimiento industrial con el salarial de naciones como Estados Unidos, mismo que dijo, creció un 22% entre 1993 y 1999, donde su salario aumentó en un 20.7%; México, por su parte, creció el 30% pero su salario se mantuvo igual durante esos años.
