- Una hembra de águila real fue liberada el pasado jueves
- La cacería de especies en riesgo es delito federal, señala Pedroza
La administración municipal de El Llano se encuentra recelosa respecto a ventilar noticias sobre el “hallazgo” de puerco espines y venados cola blanca, pues se teme desatar la cacería de unos ejemplares hoy escasos en el área serrana protegida de Juan Grande.
Aunque la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) se ha sumado a las peticiones de silencio, el alcalde César Pedroza Ortega prefirió advertir que la caza de especies amenazadas está constituida como un delito federal.
“Las leyes las tenemos bien claras, a quien hallemos haciendo algo indebido lo llevaremos a las autoridades. Para todos los ciudadanos de El Llano y pueblos de nuestro alrededor, un mensaje para que tomen en cuenta todo esto”.
El pasado 14 de agosto, en la propia zona de Juan Grande, fue liberada una hembra de águila real.
El animal es producto de un programa de conservación instalado hace seis años. Luego de criarse en uno de los dos nidos de la municipalidad emigró a Zacatecas, de donde fue devuelta para pasar una temporada más con sus padres, la única pareja de que se tiene registro.
Pedroza dijo que un grupo de especialistas enviados por la Semarnat vigilan el nido para saber si el ave fue aceptada de nueva cuenta.
“Aquí los tenemos, casi a diario en nuestro territorio”, procedentes del centro de investigación que se ubica en la capital.
Con un año y seis meses, destacó la administración, el águila se encuentra en la etapa juvenil, y por tanto, sin hábitat definido. Fue liberada con dos transmisores satelitales, y en dicho momento pesaba 4.6 kilogramos.
En el proceso participaron la Semarnat, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y la Asociación Conservación de la Biodiversidad Centro de México.
Pie de foto: Sin hábitat definido, una joven águila real es monitoreada a través de dos localizadores satelitales




