- Por el aumento de la plusvalía de Peñuelas, los ejidos venden o construyen sus predios sin permisos correspondientes
- La primer clausura fue por falta de cambio de uso de suelo e invadir una zona forestal en Peñuelas
A partir del repunte de la industria automotriz y la instalación de más empresas afiliadas a Nissan, la delegación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) indicó que el ejido de Peñuelas se convirtió en el principal objetivo para las empresas e inmobiliarias, a pesar de que se trata de una zona natural protegida por ser el hábitat de la especie de la rana de madriguera.
Debido al aumento de la plusvalía de los terrenos, se han percatado que dueños de los predios comenzaron a realizar construcciones de todo tipo sin permiso de las dependencias correspondientes, principalmente de la Semarnat.
Hasta el momento la delegación efectuó la clausura de una construcción de diez hectáreas ubicada en esta zona de Peñuelas, en la que se proyectaba una empresa de construcción de naves industriales; tras la comprobación de que los dueños no contaban con el permiso de cambio de uso de suelo, además de estar invadiendo una zona forestal.
El delegado Sergio Augusto López Ramírez aclaró que para hacer cualquier tipo de construcción se tiene que consultar primero a la Semarnat para los estudios de impacto ambiental y cambio de uso de suelo; todo el trabajo se hace en coordinación con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, la Secretaría de Gestión Urbanística y Ordenamiento Territorial y la Comisión Nacional del Agua, ya que son éstas las instancias encargadas de efectuar las sanciones correspondientes.
Con base en una denuncia, las autoridades visitan el predio en cuestión para analizar los permisos y el estatus del área, en caso de no contar con ellos la obra se detiene en su totalidad, se abre un procedimiento por parte de Profepa y se anuncia la sanción, que va desde la demolición de lo ya construido hasta la reparación del daño al ambiente con una sanción económica.
A nivel estado, la Seguot clausuró la construcción de una gasolinera sobre la carretera 45, hacia el aeropuerto, una construcción de una casa habitación sobre la curva de esa misma carretera, y una más frente a la planta de Jatco, donde se construía una casa habitación de
cuatro pisos, “según datos del secretario, en este predio ya se le había invertido alrededor de cuatro millones de pesos pero como no contaba con los permisos de nosotros ni de nadie se le clausuró la obra”.
El delegado hizo un llamado a todo los ciudadanos interesados en comprar un predio entre la carretera 45, el Aeropuerto y todos los alrededores de la planta Nissan II, a que antes de efectuar el pago o construir, acudan primero a la delegación para verificar que no se trate de una zona protegida o con vocación forestal, ya que de ser así no podrán edificar o en su caso serán acreedores a sanciones económicas.
También recordó que por Decreto estatal, todos los predios cercanos al Cerro del Muerto no pueden ser edificados a menos de que tenga un fin educativo o científico; esto debido a que se le nombró un área y monumento natural del estado.
En promedio, al mes se reciben entre tres y cuatro proyectos para cambio de uso de suelo e impacto ambiental, de los cuales sólo uno se aprueba, “se rechazan casi todos porque la gente cree que esto es sólo un requisito sin importancia y hace proyectos en zonas naturales prohibidas”; además de la zona de Peñuelas, también se han negado solicitudes para la construcción de nuevos fraccionamientos al oriente de la ciudad.