- El rector de la UAA rechazó que se piense en desaparecer carreras.
- Será el propio Consejo Universitario el que decida si se da o no el aumento a la colegiatura.
Será hasta la sesión del 31 de octubre, cuando el Consejo Universitario de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA), defina el rumbo del pliego petitorio que han planteado los estudiantes de institución a través de la Federación de Estudiantes de la UAA, así como los diversos grupos opositores a la agrupación de estudiantes.
Así lo dio a conocer Mario Andrade Cervantes, rector de la universidad, quien luego de haber recibido el pliego petitorio de manos de Alejandro Aizpuru Guevara, presidente de la FEUAA, explicó que dicha propuesta será analizada por las autoridades universitarias, así como por el propio Consejo Universitario, que en sesión del 31 de octubre, tendrá que definir la respuesta ante la principal exigencia: la negativa al aumento a la colegiatura para 2015.
Andrade Cervantes señaló que el mismo consejo ya aclaró algunas cuestiones que se han desvirtuado, en torno a la aprobación del Plan de Arbitrios y la justificación del aumento a la colegiatura a partir de enero de 2015. Sin embargo aclaró que será el mismo órgano colegiado, compuesto por autoridades, profesores y alumnos, quien decida, y en su defecto modifique el planteamiento.
Rechazó que la exigencia de los estudiantes obligue a discutir el tema antes de la fecha en que sesionará el consejo y volvió a justificar que el aumento del cuatro por ciento según el estimado de incremento al salario mínimo para el próximo año.
El rector de la UAA consideró que echar abajo el aumento a la colegiatura pudiera traer importantes problemas para la solvencia económica de la institución y negó que la misma se encuentre entre las universidades públicas más caras del país, al establecer que el subsidio que recibe, permite que el semestre cueste cerca de seis mil pesos; de lo contrario, adujo, sin el subsidio, el costo por semestre sería aproximado a los 45 mil pesos.
Los recursos propios de la universidad, expuso, representa el 16 por ciento del total del presupuesto anual, entre estos, las colegiaturas, dijo, son una importante base.
Sobre la exigencia de no cierre de carreras que transitan por momentos difíciles, tales como Filosofía, Historia, Sociología y Ciencias Ambientales, Mario Andrade aseveró que los estudiantes no tienen nada de qué preocuparse y secundado por el secretario general de la universidad, Francisco Javier Avelar González, advirtió que nunca se ha hablado de cierre de carreras, sino fortalecimiento de las mismas y evaluación y reestructuración de sus programas, razón por la que adelantó, la sesión del 31 de octubre se definirá la oferta, donde se confirmará que las carreras no desaparecerán, y llamó a los estudiantes a continuar trabajando y estudiando en conjunto con sus profesores.
En lo referente a la posible injerencia de partidos políticos a través de las representaciones estudiantiles, el rector dijo desconocer el fenómeno, y adujo que al igual que la propuesta de la FEUAA, el resto de los grupos que propongan necesidades, serán escuchados.
Andrade Cervantes y Avelar González enfatizaron que la transparencia en el otorgamiento de becas no presenta problema alguno, ya que estas se otorgan a través del mismo Consejo Universitario a través de un comité especial que administra el fondo de becas. Asimismo afirmaron que no existe urgencia alguna por llegar a la solución, ya que el Plan de Arbitrios entra en vigor a partir de enero, y puede ser modificado hasta el mes de diciembre.
