La Cantata Escénica Carmina Burana de Carl Orff es la primera parte de una trilogía llamada “Trionfi” que se completa con “Catulli Carmina” y el “Triunfo de Afrodita”, el nombre completo de la más popular de las obras que integran esta trilogía es “Cantiones profanae cantoribus et choris cantandae comitantibus instrumentis atque imaginibus magicis”, es decir, “Canciones profanas para cantante y coro para ser cantadas junto a instrumentos e imágenes mágicas”. Orff compuso esta obra entre 1935 y 1936 y la estrenó el 9 de junio de 1937 en el Teatro de la Ópera de Fráncfort, en Alemania, en plena efervescencia nazi, exactamente dos años antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial.
Desde entonces Carmina Burana ha sido una de las obras más frecuentadas en todo el mundo, y siempre que se ejecuta, se tiene prácticamente asegurado un lleno. La verdad es que es una obra espectacular, impresionante, que llama la atención de neófitos y conocedores, desde su estreno, hace ya casi 80 años, es, sin duda, una de las obras más interpretadas en la historia de la música. Su generoso efectivo orquestal y los impresionantes coros han hecho de esta partitura una de las favoritas en toda la historia de la música. De hecho, nos queda perfectamente claro que el compositor Carl Orff está condenado, por llamarle de alguna manera, a ser relacionado irremediablemente con tan sublime partitura, y no es que esto esté mal, lo triste es que el resto de su producción se ignora por completo, incluso su muy importante labor pedagógica está sepultada por los “Cantos profanos de Carmina Burana”.
La Orquesta Sinfónica de Aguascalientes presentó en el cierre de la segunda temporada del año en curso esta catedral sonora con funciones el jueves 25, viernes 26 a las 21:00 horas, y hoy domingo 28 es la tercera función a las 12:30 del mediodía, en todos los casos las presentaciones se han realizado en el Teatro Aguascalientes, la casa de la Orquesta Sinfónica. El reparto convocado para la ejecución de Carmina Burana está integrado por la soprano Lizeth Almaraz, el tenor Jorge Jiménez y el barítono Carlos Sánchez, el Coro Infantil del Centro de Estudios Musicales Manuel M. Ponce, el Coro Infantil del Centro Cultural Los Arquitos, Coro del Nivel Propedéutico Infantil de la Universidad de las Artes, el Coro de Ópera del Instituto Cultural de Aguascalientes, la licenciatura en Danza Contemporánea / Escuela de Danza George Berard de la Universidad de las Artes, la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes y la dirección del maestro David Pérez Olmedo como huésped para estas tres funciones de la obra cumbre de Orff.
Algunos escépticos podrían pensar que dada la juventud del maestro Pérez Olmedo, la obra le quedaría grande, lo comento porque en la primera función, minutos antes de iniciar la presentación alguien sentado cerca de mí hizo ese comentario, sentí el impulso casi irreprimible de hacerle notar la inmensidad de su disparatado comentario, pero gracias a Dios ganó la prudencia y preferí que este noble parroquiano se desengañara por sí mismo, al terminar la ejecución, esta persona que te comento, se deshacía en aplausos y su emoción era evidente. Efectivamente, el maestro David Pérez Olmedo es muy joven, pero su experiencia y solvencia musical no se pueden cuestionar, de hecho, ya ha dirigido anteriormente nuestra Sinfónica y siempre será interesante tener invitados con esta estatura musical. En esta ocasión, fiel a su formación, ha hecho un trabajo de primer nivel demostrando un control absoluto de todo lo que pasa en el escenario y en el foso de la orquesta, sin perder ni el más mínimo detalle.
Los tres solistas convocados para esta presentación de Carmina Burana hicieron un papel decoroso, yo asistí a las dos primeras funciones, jueves 25 y viernes 26 y el único punto débil fue la participación del tenor, el maestro Jorge Jiménez tuvo algunos problemas con la afinación que no podemos ignorar. La parte que destinada al tenor es muy complicada , es el ganso que lamenta su destino al ser asado para servirse a la mesa, Orff pide notas muy altas, de hecho, para ser cantadas por un contratenor, recuerdo en este momento, sólo como breviario cultural, la muy afortunada participación del tenor Jorge Aguilera cantando esta parte del cisne en una Carmina Burana presentada en el 2004, para ser sincero, no recuerdo la fecha, pero en aquella ocasión el director fue el maestro italiano Claudio Onofrio Gallina, y aunque me ha gustado mucho más la versión del maestro Pérez Olmedo, fue muy convincente el trabajo de Jorge Aguilera. Para la segunda función, que siempre suele ser mejor que la primera, las cosas no cambiaron mucho para el maestro Jorge Jiménez, no dudo de su capacidad como cantante, posiblemente este no es el repertorio que más le favorece. Por otra parte, Lizeth Aimaraz, soprano, y Carlos Sánchez, barítono hicieron papeles muy destacados en ambas funciones, sin duda, el barítono es el más exigido en esta partitura y el maestro Carlos Sánchez respondió con solvencia a las exigencias, salvo que por momentos era tapado por la orquesta. Sin duda hemos visto en las dos primeras funciones, por cierto, con teatro lleno, si acaso muy pocas butacas vacías en la primera, la segunda sí con el teatro a toda su capacidad, una muy buen versión de Carmina Burana de Carl Orff. Hoy domingo, a las 12:30 horas, es la tercera y última presentación con este mismo elenco, y como ya es verano y esto quiere decir que tendremos festivales, ya muy pronto tendremos noticias del de Música de Cámara a que inicia el 12 de julio, estaremos al pendiente.
