El pasado proceso electoral tuvo muchos puntos clave de análisis; desde la muestra del hartazgo a través de la apatía ciudadana hasta la emoción por los independientes, ambos temas que van íntimamente de la mano; la nueva moda de romper esquemas y representar a los ciudadanos sin tener detrás el gran aparato político del que ya se está cansado y de hacer de la cosa pública un espacio verdaderamente ciudadano.
El efecto Bronco y Kumamoto son claros ejemplos de lo que ahora muchos aspiran, sin embargo, es necesario repasar los datos arrojados de la realidad; en el proceso electoral 2014-2015 hubo un registro de 112 candidatos independientes para la elección del 7 de junio, mismos que buscaron distintos cargos, entre gubernaturas, alcaldías y diputaciones locales y federales, de éstos solamente 5 resultaron ganadores y cabe destacar, que fue con al menos 10 puntos de diferencia frente a su más cercano adversario; de los ganadores, Kumamoto Aguilar es el único que no ha sido militante o se le relaciona con partido político.
El 19 de julio hubo elecciones locales en el Estado de Chiapas con un registro de 8 candidatos independientes en búsqueda de una de las 122 alcaldías y un candidato independiente que buscó una curul del Congreso local; hasta ahora los resultados arrojados por el Programa de Resultados Preliminares, le da con un conteo del 85 por ciento de las actas la victoria a Felipe de Jesús Juárez Morales; candidato independiente por el municipio de Tecpatán, Chiapas, de oficio zapatero. Lleva un total del 24.4 por ciento de los votos, 2 por ciento sobre su más cercano contendiente el PAN que lleva el 22.71 por ciento de la votación; Tecpatán está al noroeste de Chiapas, con una población de 41 mil habitantes.
Pero ¿qué pasó en realidad con la oleada de independientes? el 73% obtuvo menos del 10% de los votos en el distrito o circunscripción electoral en la cual participó; un 17% alcanzó entre 10 y 20% de la votación y uno de cada diez obtuvo porcentajes superiores al 20%; que si bien no todos los escenarios fueron buenos, el efecto despierta el interés ciudadano y comienzan a mover las piezas de la política del país.
Se abren escenarios, pero pareciera que a los políticos tradicionales miembros de partidos no les gustó la opción de compartir; los congresos de Chihuahua, Sinaloa, Tamaulipas y Veracruz, llevaron a cabo de manera reciente, reformas en sus códigos electorales que, en lugar de impulsar, dificultan el acceso a una candidatura independiente; se impusieron candados burdos que atentan a la democracia; para participar no podrán haber estado afiliados tres años atrás; no haber participado en la elección inmediata anterior por un partido; se aumentó el porcentaje de electores que respalden la candidatura, entre otros…
Dichas medidas son muestra de una regresión del propio espíritu de la Reforma Electoral de 2014; los congresos locales demandan su soberanía y manipulan las leyes a su conveniencia, aunque sea contrario a la exigencia de la población.
Aguascalientes no es ninguna excepción; en nuestra entidad incluso antes del primer ejercicio, los partidos políticos cerraron la puerta a los independientes con requisitos complejos y limitativos; para aspirar a ser gobernador o alcalde se requiere del apoyo de al menos el 5% de los ciudadanos inscritos en la Lista Nominal, mientras que para diputado se requiere la aceptación del 3% de los ciudadanos inscritos; no podrá ser candidato aquel que fuera militante o afiliado de algún partido político en los últimos seis años previos a la elección ni haber contendido en algún procedimiento interno de selección de candidatos de algún partido político dentro de los dos procesos electorales anteriores.
Pensar en limitar la pertenencia a un partido, resulta absurdo; históricamente la única forma de acceder a algún puesto de elección popular era a través de institutos políticos; serán pocos los aspirantes del Estado que tengan intención y no se les pueda relacionar con algún partido político.
Que el que esté libre de pecado arroje la primera piedra; quizás ya más de alguno esté pensando en el amparo a la ley que sus propios partidos aprobaron…
#LaboratorioCiudadano




