- Dependencias del sector agropecuario ofrecen esquemas de apoyo a agro emprendedores
- Se requiere incentivar a jóvenes campesinas para permanecer en el medio rural: Sedatu
A decir del delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) en Aguascalientes, Isidoro Armendáriz García, es necesario detener la creciente inmigración de mujeres hacia los Estados Unidos en busca de bienestar económico y social, siendo el campo el principal exportador de personas. Según el funcionario federal, el desplazamiento de mujeres rurales al vecino país ha incrementado un 27 por ciento en el ámbito nacional en la última década con base en reportes internacionales administrados por la Organización Mundial para las Migraciones (OIM).
Tras agregar que una cuarta parte de los mexicanos radicados en el exterior viven en condiciones de pobreza, Armendáriz García resaltó la necesidad de ofrecer a este sector de la población, especialmente a las generaciones más jóvenes, estímulos para detener el abandono de parcelas.
Informó que Sedatu administraba anteriormente esquemas de apoyo como el Programa de la Mujer del Sector Agrario (Promusag) y Programa Fondo para el Apoyo a Proyectos Productivos en Núcleos Agrarios (Fappa) dirigidos específicamente a las trabajadoras del medio agropecuario, mismos que han sido delegados a Sagarpa por decreto oficial; mencionó que actualmente se opera el programa Jóvenes Emprendedores del Campo dirigido a hijas e hijos de campesinos, enfocado a generar expectativas de crecimiento económico a través de la orientación para consolidar sus propias unidades de producción agrícolas o pecuarias donde “nosotros apalancamos con un capital semilla para que se consoliden y eso elimine la posibilidad de que se vayan a Estados Unidos”.
En la entidad dicho esquema beneficia a cerca de 400 jóvenes radicados en diez comunidades y agrupados en proyectos compuestos por entre 30 y 40 integrantes: “tenemos grupos en la comunidad de los Durón, otro en la comunidad de Los Caños, en el municipio de Aguascalientes; en Pabellón de Hidalgo, Rincón de Romo; Xilotepec, Asientos; El Barranco y Carboneras en Tepezalá así como en otras localidades de Pabellón de Arteaga y San José de Gracia”.
Se desarrolla en tres etapas, la primera consta de becas con una duración de cuatro meses para la capacitación en administración de negocios agropecuarios, actividades agroempresariales y economías agrícolas. Asimismo, se imparten oficios tales como línea pecuaria, producción de forrajes y derivados de lácteos. También se ofrece enseñanza sobre riego tecnificado en cielo abierto o la producción de hortalizas en viveros antes de trasladarlos al surco, “muchos están ya produciendo quesos, cajeta, jugos, requesón, mantequilla. Otros se dedican a la horticultura.”
Armendáriz García explicó que en la segunda fase se afianzan los proyectos, la Sedatu, dependiendo del, giro apoya con montos de cuatro a cinco millones de pesos. En la última etapa, agregó, se les apoya para que terminen el equipamiento e infraestructura de su proyecto: “este programa tiene una duración de tres años, cada etapa tiene que ver con un presupuesto asignado por año de tal manera que en ese plazo, los jóvenes están maduros, cuajados y vinculados a su proyecto para que posteriormente, cuando reciben el último apoyo, garantizar la permanencia”.
Finalmente, el delegado anunció que con motivo de la reconcentración de funciones gubernamentales, Jóvenes Emprendedores del Campo pasará a la responsabilidad de Sagarpa a partir del próximo año.
