- Patricia produjo la pérdida total de ocho viviendas y daños de gravedad en decenas de fincas, entre ellas un seminario
- Habitantes piden la aplicación de fondos de desastres para subsanar los daños causados por el huracán
En Pabellón de Hidalgo, Rincón de Romos, ocho viviendas reducidas a escombro y decenas de fincas severamente dañadas, entre ellas un seminario diocesano, forman parte del inventario de “daños menores” ocasionados por Patricia en la entidad.
El huracán, registrado el pasado fin de semana, causó el desborde de la presa de San Blas, cuya corriente embistió el puente vehicular, además de casas, corrales y vehículos de la comunidad aledaña. Durante el fenómeno, al menos cincuenta habitantes de las inmediaciones de todas las edades fueron rescatados tras sufrir cuantiosas pérdidas patrimoniales.
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“Nos despertaron los crujidos del drenaje que colapsó y cuando nos paramos de la cama, el agua ya alcanzaba el medio metro. En un instante nos creció a un metro y después a dos. Mi esposo agarró a mi suegro, inválido, y yo traté de rescatar las mochilas de mi niños, pero no hubo tiempo, nos tuvimos que subir a la azotea o nos ahogábamos”, relata Esther Padilla Núñez.
De su casa no quedan más que paredes desmoronadas en medio de un lodazal, pedazos de postes caídos y árboles desprendidos del suelo desde raíz. No hay rastro de la cama, la lavadora, de ninguna prenda o utensilio de cocina, ni siquiera de la recién desempacada pantalla digital de Sedesol. Desde el sábado han estado pernoctando en un albergue habilitado al centro de la localidad: “estamos bien, aunque no nos quedó nada”.
El Ejército mexicano activó, en este y otros poblados rinconenses, el plan DN-III-E, operativo de salvaguarda a la población civil afectada por desastres naturales.
–¿Les informaron sobre el huracán?
–Algo supimos, pero nadie nunca nos dijo que tendríamos que salirnos, que hasta había refugio para nosotros (…). En el albergue nos dieron ropa y zapatos, también uniformes a mis hijos. El síndico dijo que nos va a conseguir una casa en renta pero no tenemos siquiera con qué llenarla.
El informe de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) detalla que la tormenta saturó el embalse ubicado aguas arriba, cuyos excedentes se vertieron a la cuenca en cuestión, generando el copioso derrame: “este embalse alimenta el Distrito de riego a través del túnel de Potrerillos, el agua llega a la presa Cincuenta Aniversario y después a la Calles, pero cuando el tubo se llenó, el agua escurrió a San Blas”, detalló el delegado, Salvador Gaytán Rangel.
De acuerdo al funcionario federal, el imprevisto fue momentáneo, la alarma se ha desactivado y en estos momentos el líquido se desahoga en forma natural. Actualmente la delegación estudia la estructura hidráulica cuya cortina se encuentra fabricada de mampostería y carece de vertedor de demasías, sistema que permite regular los niveles de almacenamiento. A partir del dictamen se trazarán las acciones correspondientes y se determinará la necesidad de solicitar partidas federales.
“En nuestro pueblo esto sólo lo habíamos visto en la televisión, pero esta vez nos tocó a nosotros”, admite Alejandro Zamarripa López, delegado municipal de Pabellón de Hidalgo.
La tormenta derrumbó casi en su totalidad la barda perimetral del Seminario Diocesano de Aguascalientes, cuya población es de 26 personas. El transformador y cableado eléctrico yacen a los pies de la fachada, junto con ramas de árboles caídos y cerros de tierra suelta. Una virgen de Guadalupe esculpida en cantera, ilesa, se alza por encima de aquel escenario desastroso.
Ningún seminarista resultó lesionado a pesar de que los cuerpos de emergencia no alcanzaron a evacuar a tiempo durante el aparatoso meteoro.
Según Gerardo Díaz Castañeda, director del DIF municipal, Bajío Saucillo, Escaleras y Corona 16 también fueron alcanzadas por la inundación. El funcionario señaló que muchas familias desdeñaron las advertencias y no se retiraron cuando les fue solicitado.
Todavía no se tiene cuantificado el monto económico de las pérdidas causadas por el siniestro. No se ha decidido si se solicitarán recursos extraordinarios al estado o la Federación. Actualmente el Ayuntamiento de Rincón de Romos gestiona víveres para las familias afectadas y continúa abierta la recepción de despensa, ropa, artículos de limpieza y bienes domésticos para los despojados por el llamado huracán contemporáneo más poderoso del que se tenga registro.
