Hoy en día vemos a las generaciones de niños y jóvenes obsesionados por los aparatos electrónicos, la tecnología definitivamente no es algo negativo, pero como con todo abuso, pasa que nos quejamos porque la mayoría de ellos viven enajenados, aunque en casi todos los casos la culpa es de nosotros como adultos.
Y hay ejemplos de sobra, seguramente estando en una reunión, usted ha podido constatar cómo muchos padres de familia con tal de pasar un rato agradable le facilitan el celular a su hijo pequeño para que se “entretenga” con videojuegos o en internet con tal de que “no esté dando lata”.
Así van creciendo los chicos y lo lamentamos cuando ya no existe esa convivencia o acercamiento entre las familias, las charlas por lo menos en un momento a lo largo del día, lo peor es que los problemas que como sociedad tenemos en una cultura digitalizada son cada vez mayores.
Hay varias alternativas para mantener ocupados a nuestros hijos, hoy quiero reflexionar sobre ésta que me parece una novedosa forma de aprendizaje a través precisamente de la tecnología: la robótica y la programación.
Defino primero la robótica pedagógica, que tiene como finalidad explotar el deseo de los niños y jóvenes por interactuar con un robot con varios beneficios; el mayor de ellos, favorecer los procesos cognitivos. Martial Vivet propone la siguiente definición de robótica pedagógica: “Es la actividad de concepción, creación y puesta en funcionamiento, con fines pedagógicos, de objetos tecnológicos que son reproducciones reducidas muy fieles y significativas de los procesos y herramientas robóticas que son usados cotidianamente, sobre todo, en el medio industrial”.
En estos días tuve la oportunidad de platicar con un buen amigo que ha diseñado un proyecto mediante el cual plantea que niños desde los nueve años de edad puedan recibir una hora a la semana una clase de robótica y programación con este objetivo precisamente, que los infantes desarrollen procesos creativos y resuelvan problemas.
Los llevan a comprender cómo es que funcionan las computadoras, qué hay detrás de un dispositivo tecnológico para que éste pueda llevar a cabo procesos que generen información o entretenimiento y van más allá, ya que son capaces de crear de una manera sencilla robots con distintas funciones.
No podemos dejar de lado que las carreras del futuro son precisamente las relacionadas con estas ramas de la ciencia: las ingenierías, y más aún, las que están enfocadas a la programación y robótica, dado el crecimiento industrial que no podemos negar se ha dado en Aguascalientes ante la llegada de plantas internacionales que ocupan egresados con este tipo de perfiles y con sueldos bastante dignos.
Aunado a lo anterior, estas actividades pueden contribuir a mantener a nuestros niños y jóvenes ocupados y alejados de los problemas de los que muchos no se escapan como son la delincuencia, la violencia, el uso de drogas y alcohol que desafortunadamente siguen a la alza.
Ésta puede ser una buena alternativa para los padres de familia, aunque hay muchas más: la música, el deporte, las artes, en fin, lo verdaderamente importante y como ya hemos reflexionado en otras ocasiones, es poder otorgarles las herramientas que les permitan ser mejores profesionistas. Siempre será importante el que en la medida de las posibilidades nuestros hijos fuera de la escuela tengan la oportunidad de conocer otras cosas que en un momento de su vida incluso les servirán para salir adelante.
Para cualquier comentario o información pongo a su disposición mi correo electrónico leticia.medina@gmail.com
