Vote, porque es su derecho, porque es su elección, porque sólo así seguiremos demostrando que, unidos, somos mejores, mucho más que quienes con prácticas viejas han querido convencernos de que no merecemos decidir con inteligencia nuestro futuro, quién nos representa.
Como pocos procesos, esta elección en que seleccionaremos gobernador, once presidentes municipales con sus respectivos cabildos y un nuevo Congreso local, ha puesto de manifiesto la brecha entre la clase política y la ciudadanía, que los avances tecnológicos no necesariamente implican una mejora, el ambiente de denostación y guerra sucia con que cerraron las campañas políticas evidenciaron que aun teniendo los mejores candidatos, los partidos políticos siguen con un pie en el siglo pasado y menosprecian la inteligencia de los electores.
El presente que merecemos está en nuestras manos, en los pocos minutos que nos toma ejercer nuestro derecho a elegir, vote.
En el resultado de estas elecciones no solamente se juegan la centena de cargos públicos, tenemos además la oportunidad de refrendar que los ciudadanos de Aguascalientes están muy por encima del nivel donde nos colocan quienes han querido ensuciar la elección, de los asesores que apostaron a la cerrazón, la violencia, el reparto de bisutería, para refrendar que este electorado que vive pacíficamente las transiciones y la alternancia, merece que quienes hacen las campañas electorales con base en la denostación y sin propuestas no repitan los errores y los insultos que caracterizaron este proceso, que estuvieron por encima de la inteligencia y clase de los candidatos.
Subrayamos que por encima de los aspirantes a un cargo público, porque como en pocas ocasiones diversos sectores de la sociedad convocaron a diálogos, encuentros y debates, donde algunos de los candidatos sí expusieron su idea de Aguascalientes, aprovecharon la oportunidad y brindaron propuestas… pero esos pocos que honraron su compromiso con los electores, se vieron rebasados por la idiocia de quienes apostaron a la ofensa a través de las redes sociales, de la amenaza física, la vulgaridad de borrar la línea entre vida privada y aspiración pública.
Vote porque sí hay opciones, esta jornada no se trata de elegir entre el menos malo, hay entre los candidatos excelentes personas, políticos con vocación de servicio… Sí, también están quienes abusando del sistema se lanzaron ciegos por la obsesión del poder, la prebenda, sin compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas, pero a ellos sólo se les puede eliminar mediante el voto, por eso llamamos a que ejerza libremente su derecho, porque es necesario mandar una señal clarísima de que en la democracia en que vivimos ya no caben la violencia y la banalidad.
Porque es su derecho, porque es su elección, porque unidos somos mejores, porque no podemos dejar pasar esta oportunidad y nos lo merecemos: vote.
