- Según un estudio elaborado por el IMTA
- No existe un ente regulador que en el ámbito nacional fije tarifas y evalué la gestión de los organismos operadores
La ciudad de Aguascalientes cobra la séptima tarifa de agua potable más alta de México, de acuerdo con un estudio elaborado por el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).
El análisis Modelo tarifario de agua potable en México: ventajas y debilidades el cual compara los costos del vital líquido en 30 urbes mexicanas, muestra que en la capital del estado el metro cúbico tiene un costo promedio de 0.91 dólares, lo que equivale a 18.33 pesos (considerando la cotización de este martes), lo que la coloca como la séptima ciudad con el agua más cara del país, solamente por debajo de Tijuana, 31.83 pesos; Querétaro, 28.76; León, 28.12; Ciudad de México, 23.89; Tuxtla Gutiérrez, 21.99; y Monterrey, 19.88 pesos. En cambio, las tarifas más bajas están en Villahermosa, con apenas 0.63 pesos por metro cúbico; Campeche, 2.11; Durango, 5.71; Tepic, 6.55 y Colima, 8.03 pesos.
En Aguascalientes, como en la mayoría de los municipios del país, las tarifas de este servicio son propuestas por un organismo operador autorizado por el Congreso local: Caasa, cuya concesión prometió rescindir la presidente municipal, María Teresa Jiménez, desde campaña.
En todo el país existen al menos dos mil 517 organismos dedicados a la captación, tratamiento y suministro de agua, en su mayoría trabajando en administraciones municipales; de éstos, mil 302 pertenecen a zonas urbanas y mil 215 tanto a zonas urbanas como a rurales.
Según el reporte, entre las principales debilidades del actual modelo tarifario en México destaca la inexistencia de un marco legal con criterios homogéneos en relación con la calidad del servicio, eficiencia y sostenibilidad financiera. Tampoco existe un ente regulador en el ámbito nacional que evalúe la gestión de los organismos operadores y que fije parámetros para establecer tarifas razonables y asequibles para los usuarios, lo que propicia que se den incrementos que la población no puede cubrir.
Cabe recordar que por un cobro injustificado en los recibos del agua durante más de diez años, Caasa enfrenta una demanda de 80 millones de pesos por parte de la administración municipal.
Además, los organismos operadores de agua deben enfrentar la carencia de recursos financieros lo cual limita su capacidad para pagar sus costos operativos y mejorar su infraestructura.
El IMTA propone crear un Sistema de Cuotas y Tarifas que considere los distintos usos del agua; promueva el uso eficiente del recurso; racionalice los patrones de consumo; desaliente las actividades que impliquen demandas excesivas y propicie el uso de aguas residuales.
Cabe mencionar que la prestación de los servicios de agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de aguas residuales son competencia de los gobiernos municipales, según lo establecido en el artículo 115 de la Constitución. Los municipios pueden coordinarse y asociarse para la más eficaz prestación de estos servicios o celebrar convenios con el estado para que éste se haga cargo en forma temporal.




