- Carlos Rodríguez Pasillas explicó que la instalación son 9 mil golondrinas que representan a los migrantes
- “A mí me encantaría que la gente la criticara y se apropiara de ella, que dijeran lo que le tienen que decir”
El creador de la instalación aérea del Corredor Cultural Carranza, Carlos Rodríguez Pasillas, explicó que su proyecto se basa en las golondrinas como un símbolo de la migración y la literatura que está abierto a críticas: “A mí me encantaría que la gente la criticara y se apropiara de ella, que dijeran lo que le tienen que decir”.
Continuando con la reciente tradición del Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura (IMAC) de armar una instalación artística aérea para el Corredor Cultural Carranza que se cuelga durante la Feria Nacional de San Marcos (FNSM) como las sombrillas de 2015 o las mariposas de 2016; este año fueron elegidas las golondrinas de Carlos Rodríguez Pasillas, comunicólogo especializado en la creación audiovisual.
El proyecto, explicó, fue seleccionado de tres ideas que tenía su equipo, entre las cuales había una relacionada con el tradicional deshilado de Aguascalientes, sin embargo las golondrinas, compuesta por nueve mil aves y con un costo de 215 mil pesos, destacó por su factibilidad.
La propuesta de las golondrinas, explicó, fue inspirada por Vuelo a la Lectura, programa literario del IMAC; “Los pájaros, como los han llamado, en realidad son golondrinas que tienen un simbolismo muy marcado, la instalación completa lleva una jaula con un libro a dentro del que escapan las golondrinas”.
Esta propuesta, admitió, se parece a una realizada en Santiago de Cuba, Cuba; sin embargo, aclaró que no se trata de un plagio, “Cuando empezó el proyecto el IMAC estuvo al pendiente de que no fuera un plagio luego de lo que se dijo de las sombrillas, y no, es una instalación completamente diferente, pues se conecta directamente con la poesía”.
Además, el proyecto está relacionado con la historia de la ciudad que empezó como un poblado de paso de personas que, al igual que las golondrinas, fueron migrantes, “Sí vimos lo de Cuba, yo creo que no se parece tanto y aparte no era la intención”.
Respecto a las críticas que esta instalación seguramente despertará entre la población la instalación, Rodríguez Pasillas coincidió con Alejandro Vázquez Zúñiga, director del IMAC, en que lo importante es que la sociedad discuta sobre estos temas: “Yo creo que si se logra esa interacción con la gente, la instalación está cumpliendo con su cometido”.
Rodríguez Pasillas admitió que no es una artista como ha sido calificado, sino que es comunicólogo, “Al parecer tuvimos mucha competencia, a la convocatoria llegaron más de 25 proyectos que no contaban algo y aquí lo que les gustó es que se está contando una historia”.
“En esta ocasión no es una tema de ser artista visual o artista plástico, sino de ser contador de historias; lo cual también puede hacer un comunicólogo; entonces nos armamos de un equipo y entre todos lo estamos armando”.




