- Realizan Simposio Internacional Historieta, Manga y Cultura Popular
- Se habló de beneficios entre ambos países que ayudan a consolidar las relaciones de amistad
Con el objetivo de estimular la investigación y discusión pública en torno a la historieta en México y el manga en Japón, así como de propiciar un diálogo entre ambos países, se realiza el Simposio Internacional Historieta, Manga y Cultura Popular: México y Japón a través de la Cultura Popular Contemporánea.
La noche de este jueves 1 de febrero, la Biblioteca Vasconcelos albergó la sesión 2 del simposio titulada Nuevas expresiones de la cultura popular en México en donde participaron Gabriela Alcalá Cuevas con la ponencia Nihon rokku: el ignorado éxito musical de Japón en México y Alain Zenizo Carrasco con Manga y anime gore. Contexto, Japón y su consumo en México.
Gabriela Alcalá, pasante de la licenciatura en Letras Hispánicas, conversó del consumo e impacto de la música japonesa en México. La especialista inició su charla detallando que la música japonesa se conoce en la cultura pop como J-Music y que es muy popular sobre todo en los géneros pop, hip hop, metal y el j-rock.
Agregó que fue gracias al visual kei (movimiento entre los músicos japoneses que se caracteriza por variados niveles de maquillaje, peinados elaborados y trajes extravagantes, a menudo, pero no siempre, junto a una estética andrógina) que aparecieron los primeros seguidores de la cultura japonesa en el extranjero: “Con el tiempo el visual kei se transformó en uno de los pilares de la cultura pop japonesa junto con el manga, anime y los videojuegos que abrieron una plataforma importante para generar fans dentro y fuera de Japón”.
Gabriela Alcalá precisó que desde el año 2005 los grupos de música japonesa empezaron a llegar a México, destacando la presencia del grupo Blood, quien fue el primero en tocar en el país (en Guadalajara y Ciudad de México) dando origen al intercambio comercial musical (especialmente del género rock y pop) entre México y Japón: “Lo más importante es que la influencia de la música japonesa ha generado en México una serie de acuerdos comerciales y de producción con beneficios bilaterales entre ambos países que ayudan a consolidar las relaciones de amistad y generan una comunidad cada vez más amplia, variada y que nos permite una expresión extra acerca de nuestro fanatismo y gusto por esta cultura”, expuso.
Mientras que Alain Zenizo Carrasco, estudiante de excelencia académica de la carrera de Estudios del Arte y Gestión Cultural de la Universidad Autónoma de Aguascalientes habló del concepto actual del gore, al que definió como un género sangriento, un horror que tiende a afectar el cuerpo, a la trasgresión y aspectos sexuales: “Para mí es un género que habla del eros y tanatos, de la humanidad misma, del nacimiento y la expulsión, del bien y del mal, de la representación del nacimiento y el fin, la gestación y la destrucción, y de temas que son parte del ser humano pero los cuales tienen un rechazo al mismo por cuestiones culturales e ideológicas”.
Agregó que el género gore es algo que promueve el dolor, la tortura y todo aquello que está prohibido pero que llama la atención ya que es algo propio del ser humano: “Hacer este tipo de obras es como un juego entre los permisos y las prohibiciones, es decir, qué me dejan y qué no puedo hacer, pero que eso que no puedo lo voy a hacer y de forma más fuerte”.
El estudiante también compartió el nombre de autores que trabajan el género gore y que destacan porque son impresionantes, populares, extremos, muy realistas, con trabajos interesantes, oscuros, grotescos y con estéticas novedosas: Maruo Suehiro, Junji Ito, Hideshi Hino, Waita Uziga, Shintaro Kago, Hiroya Oku y Lynn Okamoto, y puntualizó el nombre de editoriales que en México han presentado y traído obras destacadas del género como Panini Comics, Planeta, Ivrea y Astiberri Ediciones.
El Simposio Internacional Historieta, Manga y Cultura Popular: México y Japón a través de la Cultura Popular Contemporánea se realizará hasta el 4 de febrero en El Colegio de México y la Biblioteca Vasconcelos.
Con información de la Secretaría de Cultura




