- Reglamentos ha intervenido 14 lugares con este tipo de eventos en lo que va del año
- Se realizan comúnmente en terrenos cerrados, los dueños son acreedores a multas que van desde los 40 mil pesos
La Dirección de Reglamentos intenta impedir el consumo de bebidas alcohólicas y estupefacientes por parte de menores de edad con operativos para detectar fiestas clandestinas donde se venden este tipo de sustancias; el titular de la instancia, José de Jesús Aranda Ramírez precisó que se suspendió una denominada fiesta rave en la comunidad de La Perla, donde se encontraron alrededor de 200 personas; dijo que de manera constante se atienden quejas ciudadanas de este tipo en la línea de WhatsApp 449 257 70 49.
Las sanciones por este tipo de faltas van desde los 40 mil pesos e incrementa dependiendo la irregularidad en la que incurran, la cual aplica para los propietarios del inmueble, por lo que es difícil que incurran nuevamente en la renta o préstamo de sus espacios para este tipo de actividades. “Cualquier propietario de un bien tiene que tener responsabilidad y ver a qué personas se le renta o se le presta (…) incurres en una responsabilidad y más cuando está señalado ante la ley la venta de menores de edad”.
Señaló que este tipo de fiestas clandestinas cambian de punto, ya que al dueño que le cuesta la sanción no vuelve a acceder a que se realicen este tipo de eventos, ya sea que le renten, mucho menos si el espacio fue prestado; lo común es que quienes organizan no cuenten con el permiso necesario, además de que de forma recurrente se encuentra en este tipo de fiestas a menores de edad en consumo; “es lo que estamos cuidando mucho y trabajando directamente con el Issea en una campaña nacional en la que se hace ver el daño que hace a los menores el consumo del alcohol o de otra sustancia”.
El funcionario municipal dijo que en lo que va del año tienen un acumulado de 14 lugares que han sido intervenidos en coordinación con seguridad pública, son lugares principalmente terrenos cerrados en la periferia donde se aprovecha la lejanía de la mancha urbana, así como aquellos más escondidos para organizar eventos donde se cobra la entrada y se propicia que los menores sean introducidos al mundo de las drogas y el alcohol. “Se convocan a través de las redes, WhatsApp o mismo Facebook”.
Aranda Ramírez detalló que en bares y centros de entretenimiento se han llevado a cabo en el año 120 acciones entre clausuras y actas de sanción suman 200 en toda la ciudad e incluso en zonas rurales, por distintos tipos de irregularidades, entre las que se encuentra la presencia de menores.