- La vacuna contra el VPH en niñas de 10 y 11 años, el uso de condón y el Papanicolaou evitan la enfermedad
- Dicho padecimiento se conoce como el crecimiento, desarrollo y multiplicación de manera desordenada y sin control de las células del cuello del útero o matriz
El cáncer de cuello uterino es la segunda neoplasia más común en mujeres, sin embargo, es cien por ciento prevenible, así lo afirmó la encargada del Programa Estatal de Cáncer de la Mujer del Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes (Issea), Antonia Montantes Cedillo.
Explicó que dicho padecimiento se conoce como el crecimiento, desarrollo y multiplicación de manera desordenada y sin control de las células del cuello del útero o matriz.
Indicó que el cáncer de cuello uterino se asocia a la infección por el Virus de Papiloma Humano (VPH), el cual se transmite por contacto sexual y afecta a ocho de cada diez personas (hombres y mujeres) en algún momento de la vida; sólo una de cada mil mujeres con infección por este virus puede desarrollar cáncer.
Precisó que existen factores que favorecen la progresión de la infección por VPH a cáncer de cuello uterino, como el tabaquismo, las infecciones de transmisión sexual concomitantes (Herpes, Chlamydia), el uso de hormonales orales, el número elevado de embarazos, las deficiencias nutricionales y el inicio de vida sexual sin protección en la adolescencia, entre otras.
La funcionaria del Issea dijo que ocho de cada diez personas en algún momento de la vida se infectan por VPH, pero sólo en uno de cada mil la infección persiste y puede progresar a cáncer. Sin embargo, señaló que la prevención está al alcance de la población y destacó la importancia de la vacuna contra VPH, que distribuye el sector salud de manera gratuita a las niñas en edad escolar de entre diez y once años y que dijo, protege contra el 70 por ciento de los tipos de cáncer asociados a esta enfermedad.
Resaltó la importancia de promover el uso del condón, que reduce en 70 por ciento la transmisión del VPH, así como la detección y tratamiento de lesiones precancerosas, mediante el estudio de Papanicolaou.
Con información del Issea
