- En 2018, los permisos de alineación y compatibilidad urbanística prescribieron y no fueron renovados por Semarnat y Sedum
- La decisión de las instancias municipal y federal fue contestada por una demanda de la empresa fraccionadora, sin embargo, la demanda no tuvo buen cauce para la empresa que en consecuencia solicitó un recurso de revisión
Ayer, un conjunto de asociaciones civiles, expertos y personas interesadas en la protección del medio ambiente ofrecieron una conferencia de prensa para exigir a las autoridades judiciales que reiteren la decisión de negar la renovación de los permisos de alineación y compatibilidad urbanística otorgados en 2015 a la empresa que planeaba urbanizar 130 hectáreas de su propiedad, del llamado Bosque de Cobos.
Los permisos fueron entregados por parte de la Secretaría de Desarrollo Urbano Municipal (Sedum) y Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y prescribieron en diciembre de 2018.
En 2015, la empresa promotora de la urbanización de 130 hectáreas del llamado Bosque de Cobos, para la construcción de 14 mil viviendas de interés social, obtuvo los permisos de alineación y compatibilidad urbanística de la Delegación Estatal de Aguascalientes de Semarnat y la Sedum.
Sin embargo, como se informa en la nota “Uso de suelo de fraccionamiento del Bosque de Cobos” prescribe antes de que termine 2018, publicada por La Jornada Aguascalientes el 30 de enero de 2018, ése año estos permisos prescribieron y no fueron renovados por la empresa en el entendido que éste era un derecho adquirido desde 2015, lo cual no ocurrió de manera automática, poniendo un freno a la urbanización del predio, hecho que orilló a la urbanizadora a demandar a Semarnat y Sedum, demanda que no tuvo un buen resultado para la promovente toda vez que el tribunal encargado decidió que sobre el derecho de propiedad está el derecho humano a un medio ambiente sano del resto de la ciudadanía.
Como lo han mencionado en numerosas ocasiones los ambientalistas e incluso la administración municipal, las 130 hectáreas del Bosque de Cobos brindan importantes servicios ambientales al ser un área de conservación de varias especies animales y vegetales; es también una zona de recarga del manto acuífero del Valle de Aguascalientes del que actualmente se extrae más agua de la que se ingresa.
La decisión del tribunal no fue suficiente para que la fraccionadora desistiera en su intento de urbanizar el predio, pues, como se indicó en la conferencia de prensa, la empresa acudió a una segunda instancia, por lo que el caso actualmente se encuentra en revisión de un tribunal colegiado, por lo que los participantes solicitaron a este que respalde la decisión del primer juez.
Guadalupe Castorena, de Movimiento Ambiental de Aguascalientes, recordó que en marzo de 2018 se realizó la consulta pública del manifiesto de impacto ambiental del proyecto del fraccionamiento del Bosque de Cobos, para el cual se llevó a cabo la reunión pública de información en la que se demostró que el proyecto es inviable, además, los promotores desconocían aspectos técnicos, biológicos y ecológicos; se hizo también patente que no habían sido manifestados todos los impactos ambientales del proyecto ni dimensionados adecuadamente, sin contar que el proyecto no es compatible con el Programa de Desarrollo Urbano 2040.
Agustín Bernal Inguanzo, miembro del Comité de Guardabosques de Los Cobos, aclaró que se sabe que el interés del propietario del predio es legítimo, sin embargo, tal y como lo marca el Código Civil del Estado de Aguascalientes, en su momento el municipio le ofreció un terreno en permuta que no aceptó: “El Código dice que se pueden hacer permutas de terrenos por predios de igual valor catastral”.
Bernal Inguanzo informó que desde hace más de dos años, cuando los fraccionadores entraron con maquinaria a hacer excavaciones en el predio, la empresa no ha vuelto a atentar la zona, al menos de manera evidente, aunque se han presentado incendios forestales y se sigue depositando escombro.
En el último año, los guardabosques de Cobos han encontrado varias especies que habitan el Bosque de Cobos, entre las que destaca una especie de murciélago polinizador que está protegida y en grave riesgo de extinción al vivir en un área de distribución pequeña.
