- Insiste experta en que la prohibición de plástico es una media popular que no abona a la respuesta contra la sobreproducción de residuos
- Comparan la política implementada en el municipio capital con lo hecho en el país asiático, no lo recomiendan como una buena salida, pues es ahora el más contaminado del planeta
Alejandra Ramos Jaime, economista ambiental y opositora a las medidas de prohibición de plástico como una respuesta oportuna ante el grave problema ambiental que se vive en el país, comparó la prohibición de plásticos del municipio de Aguascalientes con lo que se hizo en Bangladesh, uno de los países más contaminados del mundo que también implementó esta medida sin antes indagar en el verdadero problema: la separación de la basura por fuentes, un nuevo sistema de recolección, y el aprovechamiento de los residuos.
“El primer país en prohibir las bolsas de plástico fue Bangladesh en el año 2002, ellos incluso iban mucho más adelante en eso e hicieron mandatorio, además, que todos los empaques fueran textiles porque la industria textil es muy fuerte, y a casi dos décadas de esa legislación Bangladesh es considerado al menos el décimo país que más residuos sólidos aporta a los océanos”, destacó Ramos Jaime.
Basta con hacer una búsqueda rápida en internet y se podrá encontrar que “muchos de los encabezados dirán ‘Bangladesh, el país más contaminado del mundo’. Entonces, esa realidad es la triste realidad a la que se va, porque se enfocaron en culpabilizar a un producto y no en resolver el problema de raíz que, al igual que México, es la pésima gestión de todos los residuos”.
La diferencia entre que los estados y el país apunten a que se llegue a una situación crítica, como la que está teniendo el país del sur de Asia, o que se pueda llegar a una gestión vanguardista de la recolección y el tratamiento de los residuos, radica en enfocar las políticas públicas ambientales en la educación ambiental y en la innovación de sistemas, que son verdaderamente el problema de raíz.
“Ese ejemplo me parece bastante ilustrativo para el caso de Aguascalientes”, argumentó la economista.
En Aguascalientes el gobierno de la panista Teresa Jiménez, ya prohibió el plástico como una medida ecológica, sin embargo, desde el gremio de investigación ecológica, esta medida sólo tiene tintes electoreros para ganar popularidad entre la ciudadanía.
“El problema de la contaminación en los mares, océanos y las calles es resultado de una mala administración y manejo de la basura y sucede no sólo por la mala disposición de botellas o bolsas de plástico, sino también por pañales, baterías, desechos electrónicos y metálicos”, finalizó Ramos Jaime.
Desde que se implementó como ley la prohibición de plásticos, no se ha dado un informe que pueda argumentar y comprobar que, en efecto, esa medida tuvo, tiene o ha tenido un impacto positivo en la recolección, en el tratado y en el control de la basura.




