- Especies que se comercializan ilegalmente como el abeto de Douglas, el pino prieto, el pinabete o el ayacahuite están en peligro de extinción
- El musgo, el heno y la doradilla se extraen inadecuadamente de diferentes ecosistemas, lo que provoca un daño grave en ellos
En México es muy común el uso de diferentes tipos de flores y árboles como ornamento para la época navideña, algunos de ellos forman parte de tradiciones que se han extendido durante cientos de años; sin embargo, para el biólogo Hugo Noé Araiza Arvilla, responsable del Jardín Botánico Rey Nezahualcóyotl de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, es importante tomar en cuenta distintas características para utilizarlas de manera sustentable.
Uno de ellos es el pino, que se utiliza como árbol de navidad. Esta costumbre tiene su origen en Europa y fue vista por primera vez en México gracias a los emperadores Maximiliano I y Carlota en la segunda mitad del siglo XIX. Si bien existió un tiempo en el que mucha gente elegía comprar árboles de plástico, recientemente se ha visto el interés de usar árboles naturales por razones ecológicas.
Al respecto, Araiza Arvilla puntualizó que, de las especies de pinos más comunes en Navidad, varias de ellas se encuentran en categoría de riesgo de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, como lo son el abeto de Douglas (Pseudotsuga), el pino prieto (Greggii), el pinabete (Abies guatemalensis) o el ayacahuite (Pinus ayacahuite). Invitó a las personas interesadas en preservar esta tradición a que lo hagan de manera legal y sustentable. Para ello, es importante identificar lugares con certificación de tasa de aprovechamiento, es decir, empresas dedicadas a la producción de especies de pino que no están en peligro y que incluso ofrecen, como parte del servicio, recoger el árbol para reutilizarlo responsablemente. Si en el lugar donde se adquirió no cuentan con esta última opción, es importante evitar tirarlos en contenedores o en la vía pública y consultar los puntos de recolección de árboles naturales que hayan acordado las instancias responsables de los servicios públicos.
Señaló que el musgo, el heno y recientemente la doradilla forman parte de la flora más común en los hogares por la instalación de nacimientos navideños. Al respecto, la Norma Oficial Mexicana NOM-011-SEMARNAT-1996 establece medidas especiales para el uso, aprovechamiento, transporte y almacenamiento de estas plantas, debido a su relevancia en los sistemas forestales más importantes del país, como los bosques, selvas y zonas áridas, por lo que su aprovechamiento inadecuado ocasiona daños graves a los ecosistemas en los que habitan. Además, puntualizó que lamentablemente más del 90% de su comercialización se realiza fuera de esta Norma, lo que provoca que no solamente que quien los adquiere lo haga desde la ilegalidad, sino que terminan por formar parte de la cadena de desequilibrio ecológico que se genera por la obtención irresponsable de esta flora. Por lo tanto, la mejor recomendación es evitar su uso.
El biólogo resaltó la importancia de reconocer el valor de la flora que existe en el país y que se utiliza de manera masiva en distintas festividades, ya que muchas veces se incurre en la pérdida de recursos naturales.
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