Después de este 11 de abril, faltarán ocho domingos para la cita que tenemos en la casilla más cercana a nuestro domicilio. Ahí no solo nos esperarán las y los funcionarios, quienes serán designados y debidamente capacitados por el INE en los meses de abril y mayo, también estarán nuestras boletas, tres para ser más precisos (una para la elección de diputaciones locales, una para la de ayuntamiento y otra más para la de diputaciones federales), las cuales ya se encuentran en proceso de impresión, de tal suerte que deberán estar listas en tiempo y forma para emitir nuestro voto.
Como señalaba en mi intervención anterior, concluido el periodo legal para el registro de las candidaturas, se han definido a las y los contendientes de la elección en cada una de las demarcaciones (distritos y municipios) donde elegiremos a nuestras autoridades, por lo que, a la par de la impresión de las boletas, transcurrirán las campañas en las que las personas ya definidas como candidatas pondrán a consideración de la ciudadanía sus ideas y propuestas a efecto de conseguir el preciado voto.
Resulta por demás obvio que las y los candidatos deberán encarar la campaña en medio de la contingencia sanitaria, lo que les llevará a tomar ciertas medidas que anteriormente no eran utilizadas primordialmente, como las redes sociales, las reuniones a través de plataformas virtuales, o reuniones pequeñas cara a cara, con la debida sana distancia, por encima de mítines multitudinarios. De igual manera la autoridad electoral está tomando medidas novedosas, y no por eso menos efectivas, bajo una premisa fundamental: hacer coincidir, y por lo tanto salvaguardar, el derecho que tenemos como ciudadanos de ejercer nuestro voto, dentro de un entorno de seguridad sanitaria.
Una de las inquietudes que me han hecho saber familiares, amistades y medios de comunicación, es acerca de las medidas de seguridad a adoptar en las casillas que nos permitan que sea seguro votar. Cabe hacer mención que las medidas que se tomarán serán nacionales, es decir, han sido desarrolladas por el INE como responsables de la integración y ubicación de las casillas, y han sido consensuadas con todas las entidades, a efecto de lograr uniformidad en el procedimiento y, con ello, asegurar una votación eficiente, con rapidez y, sobre todo, segura.
De entrada, acudir a votar el próximo domingo 6 de junio, es por sí mismo, tan o más seguro que ir a comprar a la tiendita de la esquina. Mientras la persona votante no tenga contacto innecesario con superficies dentro del local donde se ubica la casilla, reducirá drásticamente su probabilidad de contagio, por lo que cada votante deberá acudir a su casilla bajo esa premisa. Se pedirá a las y los votantes a que acudan a votar con cubrebocas debiendo mantenerlo puesto durante toda la acción, que inicia al ingresar e identificarse ante la presidencia de casilla, y concluye al retirarse, luego de haber depositado la boleta marcada en la urna.
Apenas ingresar, le será aplicado a la o el votante gel antibacterial en sus manos. Procederá a acercarse a la mesa donde se encuentran las y los funcionarios para mostrar su credencial para votar, a fin de su localización en la lista nominal. En cuanto eso suceda, le serán proporcionadas tres boletas, debiendo trasladarse a la mampara para que, en absoluto secreto, pueda votar.
Tratando de evitar el compartir el crayón con que se marcan las boletas y que habitualmente se encuentra dentro de la mampara, lo que pudiera generar un foco de infección, se pedirá a las y los votantes a que cada cual lleve su bolígrafo o crayón para materializar su voto, situación totalmente válida. En caso de que no lleven instrumento para marcar, de cualquier manera habrá un marcador en la casilla, mismo que será desinfectado luego de cada uso.
Solo dos personas podrán ser atendidas de manera simultánea en cada casilla, lo que reducirá el hacinamiento y provocará la sana distancia, por ello mismo se pedirá no acudir acompañado, a menos claro que tal apoyo se requiera. De igual manera, cada determinado tiempo se higienizarán los espacios y todos los implementos, procurando con ello que las superficies se encuentren libres de un potencial foco de contagio.
Así pues, las autoridades, nacional y locales, asesorados por un comité de expertos en salud, han elaborado una serie de protocolos de actuación para minimizar los riesgos de contagio, incluyendo el día más importante del proceso, que es la jornada electoral. Ya se tuvo la experiencia en elecciones en los estados de Coahuila e Hidalgo el año pasado, en medio de la pandemia, y no alteró significativamente los niveles de participación, ni los niveles de contagio.
Queda en nosotros, como ciudadanía, el conocer y, sobre todo, el atender las medidas que se están proponiendo, sabiendo de antemano que son medidas para garantizar nuestra seguridad reduciendo los posibles contagios. Cumpliéndolas a cabalidad ¡seguro que votas!
/LanderosIEE
@LanderosIEE