Algo muy cotizado, dentro del coleccionismo de las tarjetas deportivas, son las tarjetas de novato. Se considera como tal, aquella carta del jugador que se publica por primera vez, y que incluso tiene la presencia de la frase rookie card o sus siglas RC.
Generalmente, cuando es un jugador estrella o con un futuro prometedor, la tarjeta sale en su primer año dentro de la liga; sin embargo, hay otros casos de jugadores cuya tarjeta de novato, la primera que se editó con su nombre e imagen, aparece dos a tres años después de su debut.
Hay quienes coleccionan tarjetas de su equipo o jugador favorito; hay otros que se van a las posiciones; por ejemplo, mariscales de campo, corredores, incluso pateadores. Pero otros tantos eligen enfocar su energía en los recién llegados a las ligas deportivas; o por el gusto de canalizarse en otra área del coleccionismo, o porque, a la larga, resulta ser una inversión muy atractiva. Sin embargo, no deja de ser una apuesta que se puede ganar o perder.
Hace poco, se publicó la noticia de una RC de Tom Brady, que alcanzó los 2 millones de dólares. Ni qué decir de las tarjetas de Mickey Mantle, Walter Payton o Michael Jordan, por mencionar algunos casos de jugadores consolidados, donde la tarjeta de novato, y más, certificada, alcanza precios altísimos en el mercado.
Recuerdo el caso de Rick Mirer, un QB de los Halcones Marinos de Seatlle, quien en su primer año, cotizó en precios por arriba de lo común sus cartas de novato. Pero fue tan malo su desempeño que, en la actualidad, sus RC pueden encontrarse por menos de $20 pesos mexicanos cada una.
Puede darse el caso de que un novato no figure como estelar en sus primeros años, pero que, con el paso del tiempo, logre consolidarse como una estrella en su disciplina, haciendo con ello que sus tarjetas de novato, en un principio ignoradas por muchos, sean hoy de las más cotizadas y buscadas por la gente.
Sea cual sea la razón, no dejan de ser interesantes para los coleccionistas; finalmente, nos remiten también a una época de nuestra vida, donde amistades y recuerdos se conjuntan para hacernos sentir de nuevo la pasión por el deporte que amamos y que hoy, con nuevos amigos y en otros lugares quizá, seguimos disfrutando y alimentando, a su vez, la búsqueda por los objetos que hacen divertido el hobbie del coleccionismo.
TW: @LuisFerEscalona
