No tengo ninguna duda de que el sistema educativo mexicano y de gran parte de América Latina está centrado en la formación de empleados, y es algo que debemos cambiar. El mundo entero (desarrollado) está centrado en un camino acelerado por generar conocimiento por medio de la innovación, pues han entendido que esto genera la riqueza que se requiere para desarrollar sus economías; pero, ¿cómo enseñar emprendimiento?
Seamos claros, no es simplemente enseñar a los estudiantes a formar pequeños negocios y buscar desarrollos, el nuevo emprendimiento debe estar centrado en conceptos como la innovación, la disrupción, la sostenibilidad, la exponencialidad, y en el capitalismo consciente.
Una innovación es una mejora de algo, por ejemplo, los Cd´s mejoraron la calidad y el almacenamiento de los casetes que usábamos en los 80´s. La disrupción, se refiere a dejar algo completamente obsoleto, y siguiendo con el ejemplo anterior, Spotify es una disrupción en la música, pues acabó con los sistemas de almacenamiento, como los CD´s.
Para Mauricio Faciolince Prada especialista en Sostenibilidad y Economía Circular, la Sostenibilidad se refiere a la satisfacción de las necesidades actuales del planeta, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer las suyas, garantizando el equilibrio entre crecimiento económico, cuidado del medio ambiente y el bienestar social.
El Capitalismo Consciente es una nueva manera de pensar el capitalismo, desarrollando el potencial innato que tienen las compañías para crear un impacto positivo en la sociedad. Tiende a fomentar un mayor nivel de consciencia en el mundo de los negocios y pensar más allá de los beneficios (las ganancias); y la Economía Circular, es un concepto económico cuyo objetivo es que el valor de los productos, los materiales y los recursos se mantenga en la economía durante el mayor tiempo posible, reduciendo al mínimo la generación de residuos.
Estos conceptos son fundamentales para el profesionista del siglo XXI, pues nos llevan a pensar en el beneficio de TODOS, inversionistas, sociedad en general y medio ambiente.
Seamos realistas, el capitalismo como lo concebimos ha llevado a que el 1% de la población del mundo, tenga casi el 90% de la riqueza, lo que seguramente nos llevará a un colapso social en las próximas décadas. El mundo debe entender que si bien la generación de riqueza y de bienestar, son los objetivos, necesitamos que el mundo entero, sin importar las regiones, tenga las condiciones de desarrollo que les permita contar con los servicios básicos para vivir, además de aspirar a un desarrollo con crecimiento social y económico, pero en concordancia con el cuidado del medio ambiente.
¿Será posible? Por supuesto que es posible, el mundo ya trabaja en la creación de nuevos modelos que nos ayuden a un desarrollo consciente. El modelo holandés de la Dónut, el cual será aplicado en Ámsterdam, es un excelente ejemplo de como crecer, empujando a la sociedad entera, pero respetando el medio ambiente.
Al final, debemos aceptar que muestra economía latinoamericana centrada en los recursos naturales y en la mano de obra barata es el peor esquema para sobresalir y desarrollarnos en el siglo XXI, y para cambiar este paradigma, seguramente necesitaremos transformar nuestro actual sistema educativo centrado en la memorización a uno que busque la innovación y el emprendimiento.
