SpaceX es una compañía dedicada a la exploración espacial con fines comerciales. Esta es propiedad de Elon Musk, quien también dirige la empresa de carros eléctricos de lujo Tesla. Entre los logros que ha tenido SpaceX están la puesta en órbita de los satélites Starlink y también la creación de cohetes reutilizables.
Entre sus numerosas misiones está Falcon 9, un cohete lanzado en 2015. Su objetivo fue trasladar un satélite de análisis, sin embargo se quedó sin combustible para poder retornar de forma segura a la tierra. Desde ese momento fue inutilizado, por lo que quedó a la deriva en el espacio.
Al ser abandonado, fue atraído por las fuerzas gravitaciones de la Tierra, el Sol y la Luna, por lo que su trayectoria ha sido caótica. Ahora, en 2022, se espera que termine su viaje con una colisión en el satélite natural que tiene nuestro planeta.
De acuerdo con los cálculos realizados por la comunidad astronómica, este objeto que se ha convertido en basura espacial chocará contra la Luna en el mes de marzo, aproximadamente. Este es un acontecimiento de especial interés, pues será la primera ocasión que un objeto de ese tamaño impacte sin control alguno en este cuerpo celeste.
Las consecuencias serán menores de acuerdo a lo pronosticado. Si bien habrá una explosión grande al momento del contacto, solamente dejará un cráter pequeño en la superficie lunar. Otro punto a tener en cuenta es que este impacto se llevará a cabo en el lado oscuro de la Luna, por lo que es complicado hacer un rastreo del mismo y recabar información relevante.
A lo largo de los años de exploración espacial de la humanidad, han habido numerosas ocasiones en las que equipo e instrumentos utilizados en este tipo de misiones quedan inutilizados en el espacio. Si bien, la basura espacial no ha significado un problema hasta ahora, posiblemente en el futuro los restos flotando en la órbita terrestre representen un peligro para varias misiones.
