La pandemia nos ha dejado múltiples lecciones en materia de acceso a servicios de salud, educación, reactivación económica y capacidades institucionales de respuesta; sin embargo, una enseñanza transversal de todos estos ámbitos se encuentra, sin duda, en el acceso a internet y el desarrollo de capacidades para aprovechar las nuevas tecnologías y crear valor agregado a través de ellas. En este sentido, el distanciamiento, la necesidad de estudiar o trabajar desde casa y el desafío de reinventarnos diariamente durante el confinamiento nos revelaron las profundas carencias que tenemos para generar y consolidar tanto la infraestructura como los aprendizajes significativos que nos permitan potenciar el uso de internet y de las nuevas tecnologías.
En este contexto, los datos de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDITUH 2021), que realiza el INEGI, resultan muy útiles para saber en dónde estamos y hacia dónde dirigir las acciones de política pública que se requieren para reducir las brechas en esta materia. A continuación, detallaré estos aspectos.
A nivel nacional, alrededor de 88.5 millones de personas son usuarias de internet, lo que equivale al 76% en proporción a la población total cercana o mayor a 6 años. En Aguascalientes, 1.1 millones utiliza internet, una cifra que representa el 81% de la población comparable. En la Ciudad de México, casi el 90% es usuario de internet, un porcentaje que la posiciona entre las entidades federativas con mayor penetración dentro de la población.
En cuanto al lugar de acceso a internet, el 95% de la población a nivel nacional lo hace desde su hogar, cifra similar para Aguascalientes; no obstante, llama la atención que aquí más del 20% de usuarios accede a internet desde una escuela o institución educativa, lo que resulta mayor al promedio nacional, que equivale al 14.1% de los usuarios. Asimismo, destaca que casi el 90% de las personas utiliza internet para buscar información, comunicarse y entretenerse, mientras que el 83% lo hace para fortalecer su educación o capacitación. Estas últimas cifras son muy similares para el estado.
Por otro lado, hay 43 millones de personas mayores a 15 años que utilizan computadoras y otros dispositivos electrónicos, lo que representa casi el 47% del total de la población. En Aguascalientes, hay más de 530 mil usuarios de computadoras, es decir, el 50% de nuestra población. Ciudad de México y Nuevo León son las entidades con mayor porcentaje de usuarios de computadora, con el 64% y el 59% de la población, respectivamente. Del total usuarios, el 70% de la población a nivel nacional usa la computadora diariamente, una cifra semejante para el caso de nuestro estado.
En cuanto el uso de computadoras en Aguascalientes, el 45.3% de los usuarios lo hace para labores escolares; el 27.3%, como medio de capacitación; el 64.1%, para entretenimiento, y el 78% lo hacen para acceso a internet. En la entidad, el 75% de los usuarios de computadoras pertenece a la población económicamente activa, mientras que el 25% restante es considerado económicamente inactivo.
La primera preocupación que emerge sobre estos datos consiste en la brecha que aún persiste en el uso y acceso a internet. En el caso de Aguascalientes, asciende casi al 20%. Diversos estudios señalan que este fenómeno se explica, en su mayor parte, por las condiciones socioeconómicas de los hogares. Ante ello, es fundamental tomar decisiones y emprender acciones para cerrar estas brechas, pero desde un enfoque de equidad dirigido a ampliar el acceso a la tecnología y la cobertura de internet hacia los sectores más pobres de la población. En lo positivo, destacan los esfuerzos que a nivel local se han realizado para llevar internet a las escuelas, lo cual se refleja en el alto porcentaje de usuarios que accede a este servicio desde las instituciones educativas, sobre todo en comparación con el promedio nacional.
Los datos del INEGI igualmente aportan datos relevantes para la toma de decisiones, sobre todo en el uso que la mayoría de la población les da a las computadoras: entretenimiento y acceso a internet.
Finalmente, desde la Comisión de Educación y Cultura, así como de la Comisión de Ciencia y Tecnología, hemos analizado propuestas para reducir estas brechas; no obstante, es imperante fortalecer el diálogo con evidencia que contribuya a darle viabilidad política y financiera a toda iniciativa que apunte a este fin. De este modo, consolidaremos el marco legal que se requiere para, desde la equidad, reducir la brecha digital e impulsar programas que fortalezcan el alfabetismo de la información desde la educación básica.
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