- Durante la administración de Martín Orozco el pasaje del transporte urbano aumentó $3.50 pagando en efectivo, y $2.50 pagando con la tarjeta YOVOY
- Al igual que con Carlos Lozano, hubo un incremento en la tarifa justo antes de terminar su mandato
A casi dos semanas de terminar el sexenio de Martín Orozco Sandoval, la Coordinación de Movilidad (CMOV) anunció días atrás un incremento en las tarifas de transporte público urbano. Se trata del segundo ajuste durante la administración actual y este representó un 46% si se considera la tarifa que estaba cuando se tomó protesta y la que se deja de pago en efectivo para el gobierno entrante de Teresa Jiménez Esquivel.
De acuerdo a la CMOV la nueva tarifa entra en vigor este 15 de septiembre pasó de costar $9.50 a costar $10 si se paga con la tarjeta YOVOY u $11 si se paga en efectivo. La tarifa de $9.50, también notificada durante el gobierno de Martin Orozco duró casi tres años, se anunció en diciembre del 2019, y después de eso se mantuvo así hasta ahora, ya en la recta final del gobierno que como promesa de campaña dijo que renovaría el sistema de transporte público.
Antes de costar $9.50 el pasaje para usar camiones costaba $7.50, esa fue la tarifa con la cual el exgobernador, Carlos Lozano de la Torre, pasó la batuta a Martín Orozco Sandoval, todavía bajo el deficiente sistema de ATUSA, sin una Ley de Movilidad novedosa y sin la CMOV como hoy se conoce ahora.
Considerando que cuando tomó protesta el actual gobierno la tarifa estaba en $7.50, el último ajuste, a $11 en efectivo, supone un incremento de 46% ($3.50) en el pasaje del transporte público urbano durante los últimos seis años. Paralelamente, el aumento de precio es del 33% ($2.50) si se considera el pago con la nueva tarjeta de prepago YOVOY.
Después del incremento que se anunció en diciembre del 2019, y ya con los cambios de fondo que se estaban haciendo en el sistema de transporte urbano, dejando atrás el modelo de ATUSA y reinvirtiendo en flotas de autobuses para tratar de responder al rezago que se dejó, a lo largo de estos casi tres años el gobierno sostuvo una premisa: no habrá un aumento en las tarifas si no hay una mejora tangible del servicio.
Pasaron los meses y ante los cuestionamientos, la respuesta siempre fue la misma. Luego, en septiembre del 2022, la CMOV anunció el último ajuste del sexenio, pues se consideró que ya había una mejora -pese a las quejas ciudadanas- y dado que a la par las condiciones económicas ya lo ameritaba, pues la inflación estaba llegando a tasas que no se habían visto hace poco más de 20 años.
Antes de que el camión costará $7.50, con Lozano de la Torre, este costaba $6, y se mantuvo así durante cerca de seis años. Fue, también, justo antes de terminar su sexenio que se anunció el ajuste para dejar el pasaje a $7.50 al gobierno entrante de Martín Orozco, cuyo pilar sería la movilidad.
Las justificaciones del gobierno
En el 2019, fue el secretario general de Gobierno, Enrique Morán Faz quien se encargó de notificar el que sería el primer ajuste en la tarifa del camión. Dijo: “durante la sesión del Consejo Consultivo se consideró la necesidad de un ajuste, después de tres años de no haber autorizado ningún incremento, a pesar de que los insumos para la operación de unidades han tenido movimientos al alza, como es el caso de combustibles, refacciones, mantenimiento vehicular, renovación de flota, personal y gastos administrativos, entre otros”.
En esta última ocasión fue Ricardo Serrano Rangel, titular de la CMOV, quien se encargó de avisar y tratar de justificar el aumento. El boletín enviado ya casi concluido el sexenio y en medio del primer informe del presidente Leonardo Montañez dice: “La Coordinación General de Movilidad autorizó este día un ajuste en las tarifas de las diferentes modalidades de transporte público en la entidad, luego de analizar la situación económica en materia de inflación, así como las mejoras que se han impulsado durante la presente administración para ofrecer un servicio de mayor calidad para el usuario”.