Nadie puede negar el impacto que ha tenido Nvidia en el mundo de las tarjetas gráficas. Con un asombroso 88% de cuota en el mercado de GPUs para PC, Nvidia ha dejado a AMD con un pequeño pero importante 12%. Ante este escenario, AMD se ha visto obligada a replantear su estrategia en varios frentes, alejándose del foco de competir en las gamas más altas y centrándose en sectores donde puede ganar terreno.
El dominio de Nvidia y la respuesta de AMD
El éxito de Nvidia no es una casualidad ni un golpe de suerte. Es evidente que la compañía ha sabido jugar sus cartas de manera brillante, particularmente en el segmento de gaming de alta gama y en la inteligencia artificial, dos áreas en las que su presencia es casi incontestable. Con GPUs como la H100 y H200, la compañía ha afianzado su lugar en gaming y en las principales plataformas de casinos online mexicanos, donde los gráficos fluidos y veloces son indispensables para mejorar cada sesión de juego.
Ante este escenario, la compañía estadounidense se enfrenta a la realidad de que competir directamente con Nvidia en la gama alta ya no es viable. Según declaraciones del vicepresidente sénior de la compañía, la nueva prioridad es alcanzar una mayor cuota de mercado enfocándose en las gamas media y baja, donde puede capturar una mayor base de usuarios.
Mientras Nvidia sigue siendo el gigante del alto rendimiento, AMD quiere que sus productos lleguen a las manos de más personas, aquellos que buscan una buena relación calidad-precio.
La ofensiva de AMD en IA
Aunque la mayoría piensa en gaming cuando escucha sobre tarjetas gráficas, la verdadera batalla se libra en el campo de la inteligencia artificial, donde Nvidia ha sido la estrella. Pero AMD no se ha quedado de brazos cruzados y ha comenzado a marcar su presencia en este sector gracias a sus aceleradores Instinct MI300, que han superado los mil millones de dólares en ventas trimestrales.
Pero esto no es todo. Recientemente, AMD adquirió ZT Systems por 4.900 millones de dólares, una jugada que le otorga nuevas tecnologías y recursos para competir de manera más directa en el terreno de centros de datos y servidores, donde Nvidia también tiene una fuerte presencia.
Oportunidades en tiempos difíciles
El panorama de AMD no está exento de dificultades, ya que la estrategia que ha adoptado es arriesgada, pero también está llena de posibilidades. Al no centrarse en ser el líder absoluto en términos de rendimiento, la compañía ha optado por ofrecer lo que podría considerarse un equilibrio ideal entre precio y prestaciones.
No obstante, la lucha no será fácil. Nvidia continúa ampliando su oferta de productos y mantiene su liderazgo en múltiples segmentos de la tecnología de chips. A pesar de ello, AMD tiene una oportunidad importante al centrarse en mercados emergentes y soluciones más accesibles para usuarios y empresas.
La pregunta que queda en el aire es: ¿logrará empresa californiana sacar provecho de estas oportunidades y mantener su relevancia en un mercado tan competitivo? El reloj sigue corriendo y la industria observa con atención cada paso que den ambos gigantes.
