- La inteligencia artificial (IA) está redefiniendo la manera en que aprendemos y enseñamos. Desde la automatización de tareas hasta la personalización del aprendizaje, esta tecnología está revolucionando el ámbito educativo en México y el mundo. Claudia Nallely Sánchez Gómez, secretaria de Investigación de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Panamericana campus Aguascalientes, comparte su visión sobre los avances, oportunidades y desafíos que plantea la IA en la educación.
“La IA está marcando un antes y un después en la educación, permitiendo que los procesos sean más eficientes y accesibles. Su impacto es comparable al que tuvieron las computadoras personales en su momento”, señala Sánchez. De acuerdo con la especialista, esta tecnología no solo facilita el aprendizaje al ofrecer acceso inmediato a información detallada, sino que también transforma el rol del profesor y las dinámicas de enseñanza en el aula.
La IA como herramienta para potenciar el aprendizaje
Uno de los avances más destacados en la IA aplicada a la educación son los modelos de lenguaje natural, como ChatGPT. Estas herramientas actúan como asistentes virtuales, respondiendo preguntas, explicando conceptos complejos y ayudando a los estudiantes a resolver problemas: “Es como tener un profesor personal disponible las 24 horas. Puedes pedirle que te explique un tema difícil y, si no entiendes, reformular la pregunta hasta que lo comprendas completamente”, explica Sánchez y destaca cómo estas tecnologías están revolucionando el acceso al conocimiento.
Además, la IA está facilitando una de las demandas más urgentes de la educación: la personalización del aprendizaje. Plataformas basadas en IA permiten a los estudiantes avanzar a su propio ritmo, mientras los profesores obtienen datos precisos sobre su progreso y necesidades específicas. Por ejemplo, Claudia Nallely Sánchez Gómez menciona su experiencia con una plataforma llamada Matific, utilizada para la enseñanza de matemáticas a nivel básico: “La plataforma no solo hace que los niños aprendan con actividades interactivas, sino que genera reportes detallados para los profesores, indicando qué áreas necesitan mayor atención. Esto nos permite enfocar nuestros esfuerzos donde realmente importa”, añade.
El profesor, pieza clave en la era de la IA
Aunque la IA ofrece posibilidades extraordinarias, la Dra. Sánchez subraya que nunca podrá sustituir el componente humano en la educación: “El aprendizaje no solo se trata de adquirir conocimientos; también implica construir relaciones y desarrollar habilidades emocionales y sociales. La IA puede automatizar tareas, pero no puede reemplazar la empatía y la conexión humana que un profesor brinda a sus estudiantes”, afirma.
En este sentido, Sánchez destaca que el rol del docente evoluciona en un entorno donde las tecnologías emergentes complementan la labor educativa. La IA libera tiempo de los profesores al encargarse de tareas repetitivas, como la calificación de ejercicios o la generación de reportes, permitiéndoles concentrarse en actividades más significativas, como asesorar y motivar a los alumnos.
“Como profesores, nuestro objetivo es guiar y formar a nuestros estudiantes, ayudándolos a enfrentar desafíos y superar sus propios límites. La IA es una aliada poderosa, pero el desarrollo integral de una persona necesita más que tecnología; requiere la atención y el compromiso de un mentor”, enfatiza.
Avances actuales y el futuro de la IA en la educación
En cuanto al futuro, Claudia Nallely Sánchez Gómez visualiza un panorama esperanzador donde la IA se utiliza para optimizar los procesos educativos y fortalecer la experiencia de aprendizaje. Entre los avances que ya se están implementando, destaca el uso de herramientas para automatizar tareas administrativas, la personalización del contenido educativo y el desarrollo de plataformas que evalúan automáticamente el desempeño de los estudiantes.
A largo plazo, Sánchez prevé cambios significativos en la interacción con las herramientas tecnológicas: “Imaginemos un futuro donde los profesores dicten directamente a un sistema que les prepare un examen adaptado a las necesidades de su clase o donde los estudiantes utilicen libretas digitales que evalúan automáticamente sus tareas. Estas innovaciones no solo simplificarán procesos, sino que abrirán más espacio para la creatividad y la interacción humana”, señala.
Además, la Facultad de Ingeniería de la Universidad Panamericana ya está trabajando activamente en la integración de la IA en la educación. Desde talleres en escuelas hasta proyectos de investigación con estudiantes universitarios, la institución busca preparar a las nuevas generaciones para utilizar estas herramientas de manera crítica y ética. “Nuestros estudiantes entienden que la IA no es solo una herramienta, sino un recurso que deben dominar para complementar sus habilidades y enfrentar los retos del futuro”, concluyó.
