Generado por el Weltethos institut (WI), el índice de inclusividad a nivel mundial ofrece la posibilidad de analizar una posible globalización con base en la dignidad humana, aunque el propio WI concluye que la actual globalización está lejos de lograrlo por no ser equitativa.
Para lograr una globalización con dignidad humana es necesario:
- Incorporar los derechos humanos a la globalización mediante el reconocimiento de la dignidad humana de las personas.
- Romper las fronteras, unificar las sociedades y hacer valer la igualdad y la justicia.
- Permitir el acceso a mercados más vastos, flujos de capital, tecnología, importaciones más baratas y mercados de exportación más amplios.
El desarrollo inclusivo es necesario exige:
- Poner a la persona en el centro y unir voluntades y capacidades.
- Avances científico-técnicos equitativos, es decir, que todos tengan acceso en igualdad de condiciones a aquello a lo que tienen derecho.
- Crecimiento económico que se traduzca en mayores libertades y oportunidades para las personas.
Desafíos de la globalización actual
La actual globalización no es equitativa, lo que ha dado lugar a crisis de valores morales, culturales y políticos, así como a la pérdida de valores tradicionales de las comunidades humanas. En este sentido, el índice de inclusividad a nivel mundial ofrece las siguientes posibilidades de análisis:
- Comparativo. Permite realizar comparaciones entre países y regiones, así como a lo largo de un periodo de tiempo
- Integral. Abarca las dimensiones social, ecológica, ética y económica del desarrollo.
- Verificable. Ae basa en datos e índices existentes, lo que garantiza su validez y fiabilidad.
- Transparente. La metodología para crear el índice es transparente y está abierta al escrutinio, lo que promueve la responsabilidad y la confianza.
- Aplicable. Puede utilizarse para identificar los puntos fuertes y débiles del enfoque de un país en materia de desarrollo inclusivo, lo que sirve de base para las intervenciones políticas.
Para el caso específico de México, y de acuerdo con el índice de inclusividad, no se han dado las condiciones para garantizar el acceso a los mismos derechos, oportunidades y recursos para todos, por carecer de una sociedad participativa, una mejor distribución de los recursos y presentar altos niveles de corrupción y desconfianza.

El coeficiente de Gini es el método más utilizado para medir la desigualdad. Es una herramienta analítica que suele emplearse para justipreciar la concentración de los ingresos entre los habitantes de un país o región, en un periodo de tiempo determinado.
Los países miembros del Foro de Cooperación Económica de Asia-Pacífico (APEC) son: Australia, Brunei, Canadá, Chile, República Popular China, Estados Unidos, Filipinas, Hong Kong, Indonesia, Japón y Corea del Sur. También: Malasia, México, Nueva Zelandia, Papúa Nueva Guinea, Perú, Rusia, Singapur, Tailandia, Taiwán y Vietnam.
El Índice de Inclusividad los separa entre países en equilibrio (11) y países críticos (10) entre los que destaca México con 0.666 puntos.





