- Un cambio de actitud en quienes imparten justicia puede tener un impacto real en la vida de niñas y niños
- Loretta Ortiz impulsa desde la Suprema Corte decisiones a favor de los derechos de la niñez
- La ministra destacó la urgencia de adecuar procesos judiciales al desarrollo infantil
Con motivo del Día de la Niñez, la ministra Loretta Ortiz afirmó que una verdadera transformación del Poder Judicial debe comenzar por adaptar el sistema de justicia a las necesidades específicas de niñas y niños, especialmente aquellos que han sido víctimas del reclutamiento por parte del crimen organizado.
Aseguró que para mejorar la justicia en México para niñas, niños y adolescentes es indispensable fortalecer el sistema especializado de justicia para adolescentes y las Procuradurías de Protección. Asimismo, consideró fundamental garantizar procesos judiciales adecuados para su etapa de desarrollo y fomentar su participación activa.
Ortiz subrayó que esta transformación no debe quedarse en el discurso, sino traducirse en inversión en infraestructura, ajustes en los procedimientos para asegurar su derecho a ser escuchados, acceso a información comprensible y formación de personal con conocimientos técnicos y sensibilidad sobre salud física y mental infantil.
“Aunque sus derechos están reconocidos constitucionalmente, un simple cambio de actitud por parte de quienes imparten justicia puede contribuir a tener infancias más protegidas y seguras. Como futura presidenta de la Corte, haré todo lo que esté en mis manos para que así sea”, expresó.
La ministra recordó que desde su ponencia en la Suprema Corte se han impulsado decisiones históricas en defensa de la niñez. Mencionó dos proyectos relevantes aprobados esta semana: uno reconoce el derecho de niñas y niños a ser protegidos de la violencia digital, cibernética y de la inteligencia artificial; otro invalida una norma que limitaba la convivencia con los abuelos paternos si el padre cometió o intentó cometer feminicidio, protegiendo así el interés superior de la niñez y su derecho a mantener vínculos con sus redes de cuidado.