Julión Álvarez vuelve a quedar fuera del escenario… pero no por decisión propia. Este 24 de mayo, el intérprete chiapaneco debía presentarse en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, en un concierto con entradas agotadas. Sin embargo, la función fue suspendida luego de que el gobierno de Estados Unidos le cancelara, una vez más, su visa de trabajo. La noticia fue confirmada por el propio cantante a través de un video en sus redes sociales, en el que explicó que tanto él como su equipo recibieron la notificación de la revocación el día anterior, el 23 de mayo.
El incidente recuerda inevitablemente el episodio de 2017, cuando la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro incluyó a Julión en su “lista negra” por presuntos vínculos financieros con el narcotraficante Raúl Flores Hernández, alias El Tío. En aquel entonces, también fue cancelada su visa y congelados sus activos en Estados Unidos. En mayo de 2022, Álvarez anunció públicamente que había sido retirado de esa lista, tras varios años de litigio y restricciones que afectaron tanto su carrera como su entorno personal.
El regreso del veto migratorio, sin embargo, deja más dudas que certezas. Julión aseguró desconocer los motivos exactos de la nueva cancelación y expresó que la situación “está fuera de sus manos”. Aunque ofreció disculpas a su público y confirmó que los boletos siguen siendo válidos o pueden ser reembolsados, no ofreció claridad sobre si la suspensión está relacionada con nuevas investigaciones o si se trata de una medida preventiva por parte del gobierno de EE.UU.
Este tipo de acciones no son inéditas. Apenas en marzo, el gobierno estadounidense revocó las visas de trabajo y turismo del grupo norteño Los Alegres del Barranco, luego de que proyectaran imágenes de El Mencho en un concierto, en lo que se interpretó como un homenaje al líder del CJNG. En palabras del subsecretario Christopher Landau: la libertad de expresión no está exenta de consecuencias. Aunque Julión no ha estado involucrado en actos similares desde su salida de la lista OFAC, su historial parece seguirlo como sombra.
En este contexto, el caso pone sobre la mesa la ambigüedad del sistema de sanciones migratorias. Si Julión ya fue liberado formalmente de acusaciones pasadas, ¿por qué no puede trabajar libremente en territorio estadounidense? ¿Existe nueva información que justifique este veto, o estamos ante una medida de perfil preventivo a la vieja usanza del “mejor que sobre, a que falte”?
Mientras tanto, su equipo de promoción (CMN y Copar Music) ha confirmado que el evento será reprogramado, aunque sin fecha definida. La estructura del escenario ya estaba montada, el personal en sitio y los fans listos para el show. Pero entre listas negras del pasado y decisiones unilaterales del presente, el “rey de la taquilla” se vuelve a enfrentar a una frontera que ni su éxito comercial puede cruzar.




