El fútbol tiene una manera cruel de recordarnos que los trofeos no siempre garantizan estabilidad. Ange Postecoglou, el técnico australiano que hace apenas 16 días levantó la Europa League con el Tottenham, poniendo fin a una sequía de títulos de 17 años, ha sido despedido. Sí, leíste bien: 16 días después de hacer historia, el hombre que trajo el “Angeball” a Londres ya no está. ¿Qué llevó a los Spurs a tomar esta decisión tan drástica? Acompáñame a desentrañar esta historia que mezcla gloria, pragmatismo y un patrón inquietante en el club del norte de Londres.
La gloria europea de Postecoglou
El 21 de mayo de 2025, Ange Postecoglou se convirtió en el tercer entrenador en la historia del Tottenham en levantar un trofeo europeo, al ganar la Europa League tras derrotar al Manchester United 1-0 en la final. Este título no solo marcó el primer trofeo de los Spurs desde la Copa de la Liga de 2008, sino que también consolidó a Postecoglou como un héroe para los aficionados. El australiano, conocido por su filosofía ofensiva y su carisma, había cumplido su promesa de “siempre ganar” en su segunda temporada, algo que él mismo había proclamado al llegar al club desde el Celtic el 6 de junio de 2023.
El camino hacia la Europa League no fue sencillo. Aunque el Tottenham mostró un cambio táctico notable en Europa, su campaña doméstica fue un desastre. En la Premier League 2024-25, los Spurs sufrieron una temporada mediocre, terminando en una posición que no cumplió con las expectativas de un club que aspira a pelear por la Champions League.
¿Por qué despidieron a Postecoglou?
A pesar del éxito europeo, la directiva del Tottenham, liderada por Daniel Levy, tomó la decisión de despedir a Postecoglou, exactamente dos años después de su llegada. Los motivos, aunque no oficiales, parecen claros si analizamos el contexto. Primero, el rendimiento en la Premier League fue “extremadamente decepcionante”, un término que Levy ya había usado en el pasado para justificar despidos. Los Spurs no lograron clasificarse a la Champions League porque terminaron en el lugar 17 de la tabla sino, gracias a la Europa League, y su inconsistencia en la liga generó frustración entre los aficionados y la directiva. El “Angeball”, ese estilo ofensivo y vertiginoso que enamoró a muchos en su primera temporada, se volvió un arma de doble filo: entretenido, sí, pero también caótico, con una defensa que parecía un colador.
Además, la relación entre Postecoglou y la directiva se había deteriorado. Según reportes, el australiano expresó su frustración por la falta de refuerzos en el mercado de invierno, lo que limitó su capacidad para competir en múltiples frentes. Su cambio hacia un enfoque más pragmático en Europa, también generó críticas internas: algunos en el club sintieron que Postecoglou había perdido su identidad táctica, mientras que otros lo acusaron de no adaptarse lo suficiente a la Premier League.
Por último, la presión de los aficionados y la sombra de técnicos anteriores jugaron un papel. Postecoglou había sido alabado por su carisma y su conexión con la grada, pero las derrotas abultadas en la liga, como la infame caída 4-1 ante Chelsea en noviembre de 2023 (donde los Spurs insistieron en una línea alta con nueve jugadores), dejaron cicatrices. La directiva, conocida por su impaciencia, decidió actuar antes de que la temporada 2025-26 comenzara a torcerse.
Un patrón inquietante: El Tottenham y su historial de despidos post-éxito
Lo que le sucedió a Postecoglou no es un caso aislado en el Tottenham. Este despido se suma a un patrón preocupante que parece perseguir al club: premiar el éxito con la puerta de salida.
En noviembre de 2019, Mauricio Pochettino fue despedido apenas cinco meses después de llevar a los Spurs a su primera final de Champions League, donde cayeron 2-0 ante el Liverpool. Pochettino había transformado al Tottenham en un contendiente serio, con un tercer puesto en la Premier League 2015-16 y un subcampeonato en 2016-17, pero un inicio irregular en la temporada 2019-20 (con el equipo en el puesto 14) llevó a Levy a reemplazarlo por José Mourinho. La decisión fue duramente criticada, ya que Pochettino era adorado por los hinchas y había construido una base sólida con jugadores como Harry Kane, Dele Alli y Son Heung-Min.
El caso de Mourinho es igual de revelador. El técnico portugués, contratado para “ganar trofeos”, llevó al Tottenham a la final de la Copa de la Liga en 2021, pero fue despedido seis días antes del partido decisivo contra el Manchester City (que los Spurs perdieron 1-0 con Ryan Mason como interino). La razón oficial fue, nuevamente, el mal rendimiento en la Premier League, donde el equipo estaba séptimo y fuera de los puestos europeos. La ironía es que Mourinho, conocido por su pragmatismo, fue despedido justo cuando estaba a punto de cumplir el objetivo que se le había encomendado: ganar un título.
Ahora, con Postecoglou, la historia se repite. El australiano logró lo que ni Pochettino ni Mourinho pudieron, un trofeo, pero el Tottenham parece incapaz de tolerar altibajos en la liga. Este patrón sugiere una falta de visión a largo plazo por parte de la directiva, que prioriza resultados inmediatos sobre la construcción de un proyecto sostenible.
¿Qué sigue para el Tottenham y Postecoglou?
El despido de Postecoglou deja al Tottenham en una encrucijada. Según Sky Sports News, Thomas Frank, actual técnico del Brentford, es el favorito para tomar el banquillo de los Spurs. Frank ha impresionado con su trabajo en el Brentford, llevando al equipo a pelear por puestos europeos con un presupuesto limitado, pero su llegada no garantiza estabilidad. Los hinchas, hartos de esta montaña rusa emocional, exigen un proyecto claro que no sacrifique a sus héroes tan pronto.
Para Postecoglou, este despido no es el fin. El australiano, quien ya hizo historia en Australia con el Brisbane Roar (36 partidos invicto) y llevó a la selección australiana a ganar la Copa Asiática en 2015, tiene un currículum que lo respalda. En su declaración tras el despido, expresó: “Cuando reflexiono sobre mi tiempo como entrenador del Tottenham Hotspur, mi emoción principal es el orgullo”. No hay duda de que pronto encontrará un nuevo desafío, posiblemente en un club que valore su visión a largo plazo.
¿Es el Tottenham su peor enemigo?
La salida de Ange Postecoglou deja más preguntas que respuestas. ¿Por qué un club que lleva 17 años sin trofeos despide a un técnico que rompe esa sequía?, ¿es el Tottenham incapaz de construir sobre sus éxitos? La historia de Postecoglou, Pochettino y Mourinho sugiere que el problema no está en los entrenadores, sino en una directiva que parece reaccionar más al pánico que a la lógica. Mientras los Spurs celebran su título de Europa League, la sombra de este despido recuerda que, en el fútbol, la gloria puede ser tan efímera como un aplauso.
