El fútbol mexicano está en ebullición con una noticia que ha generado más críticas que aplausos: Fernando Gago, el técnico argentino que dejó un sabor amargo en Chivas, ha alcanzado un acuerdo verbal para convertirse en el nuevo Director Técnico del Necaxa.
Según fuentes cercanas, las negociaciones entre Gago y el club de Aguascalientes fueron rápidas, y ambas partes han pactado un contrato que se extenderá hasta junio de 2026, con opción de renovación. Curiosamente, el contrato no incluye una cláusula de rescisión, una decisión que parece reflejar las lecciones aprendidas tras la salida de Nicolás Larcamón, quien está a punto de ser anunciado como nuevo DT del Cruz Azul.
De Chivas a Boca Juniors: La salida polémica de Gago
Fernando Gago llegó a Chivas a principios de 2024 con un currículum que prometía: ex jugador del Real Madrid, experiencia en el fútbol argentino con Aldosivi y Racing Club, y un estilo de juego ofensivo que buscaba romper con el conservadurismo del fútbol mexicano. En su primera temporada, las cosas parecían ir bien: llevó al Rebaño a las semifinales del Clausura 2024, donde fueron eliminados por el eventual campeón, Club América. Sin embargo, el Apertura 2024 marcó el inicio de su declive. Chivas comenzó a mostrar inconsistencias, y la gota que derramó el vaso fue la derrota en el Clásico Tapatío contra Atlas, un golpe duro para la afición rojiblanca.
Lo que vino después fue un escándalo que aún resuena en Guadalajara. Tras la derrota ante Atlas, Gago declaró públicamente que no tenía ningún acuerdo con Boca Juniors y que su compromiso estaba con Chivas. Sin embargo, apenas unos días después, el argentino hizo un giro dramático: firmó con Boca Juniors y regresó a su país natal, dejando al Rebaño en medio de una crisis deportiva y emocional. La afición de Chivas no lo perdonó. En redes sociales, Gago fue acusado de “traidor” y de priorizar su carrera personal sobre el proyecto que había jurado defender. Su salida dejó a Chivas en una posición vulnerable, con un plantel desmotivado y un interinato que no pudo enderezar el rumbo.
El regreso de Gago al Necaxa: ¿Un error monumental?
El acuerdo verbal entre Gago y el Necaxa llega en un momento de transición para el club. Según reportes, Nicolás Larcamón, quien llevó al Necaxa a un nivel competitivo en el Clausura 2025, está a punto de cerrar su traspaso al Cruz Azul, que pagará una cláusula de rescisión de 2.5 millones de dólares para hacerse con sus servicios.
Larcamón, un técnico joven y con ideas frescas, había logrado que el Necaxa se convirtiera en un equipo incómodo para los grandes, con un estilo de juego equilibrado que combinaba solidez defensiva y transiciones rápidas. Su salida, aunque no oficial, ya genera incertidumbre entre los aficionados de los Rayos.
La llegada de Gago, sin embargo, no ha sido bien recibida por la mayoría. Para muchos, su regreso al fútbol mexicano es un retroceso, tanto para la Liga MX como para el propio Necaxa. ¿Las razones? Primero, su historial reciente. Gago no logró consolidar un proyecto sólido ni en Chivas ni en Boca Juniors, donde su paso también fue criticado por falta de resultados. En Boca, el argentino tuvo un récord de 17 victorias, 6 empates y 7 derrotas en 30 partidos, un desempeño mediocre para un club de esa magnitud. Su estilo de juego, basado en la posesión y la presión alta, requiere tiempo y un plantel específico, algo que el Necaxa, con un presupuesto limitado y un equipo en transición, podría no estar en condiciones de ofrecer.
Segundo, la ausencia de una cláusula de rescisión en el contrato de Gago genera desconfianza. Si bien esta decisión podría interpretarse como un gesto de compromiso mutuo, también refleja el temor del Necaxa a que Gago repita su salida abrupta, como ocurrió en Chivas. Para un club que busca estabilidad tras la partida de Larcamón, apostar por un técnico con un historial de inconstancia parece una jugada arriesgada.
El impacto en el fútbol mexicano
El regreso de Gago al fútbol mexicano también ha reavivado un debate más amplio: la falta de visión a largo plazo en la Liga MX. En los últimos años, clubes como Necaxa han apostado por técnicos jóvenes y con ideas innovadoras, como Larcamón, quien a sus 40 años representaba una generación de entrenadores dispuestos a modernizar el fútbol mexicano. Larcamón, con su capacidad para maximizar recursos limitados y su enfoque táctico flexible, había convertido al Necaxa en un equipo competitivo, alcanzando los cuartos de final en el Apertura 2024 y mostrando un estilo de juego atractivo.
Gago, por otro lado, llega con más dudas que certezas. Su etapa en Chivas dejó claro que no siempre sabe adaptarse a las exigencias del fútbol mexicano, donde los resultados inmediatos suelen pesar más que los procesos a largo plazo. Además, su falta de compromiso con proyectos anteriores genera escepticismo entre los aficionados, quienes temen que el Necaxa se convierta en un trampolín más para el argentino, en lugar de un proyecto serio.
Para el fútbol mexicano en general, este movimiento refuerza una tendencia preocupante: la preferencia por nombres extranjeros con “pedigrí” europeo, aunque sus resultados recientes no lo justifiquen. Mientras técnicos locales como Ignacio Ambriz luchan por encontrar oportunidades en clubes grandes, la llegada de Gago parece perpetuar la idea de que lo extranjero siempre es mejor, incluso cuando las pruebas sugieren lo contrario.
¿Qué sigue para el Necaxa con Gago?
El contrato de Gago hasta junio de 2026 le da un margen de maniobra, pero el técnico argentino enfrentará un desafío monumental. El Necaxa no tiene el presupuesto ni el plantel de un equipo como Chivas o Boca Juniors, y la afición de los Rayos, aunque apasionada, no tolerará un nuevo fracaso. Gago necesitará adaptar su filosofía de posesión a un equipo que ha funcionado mejor con un enfoque más directo y pragmático bajo Larcamón. Si no logra resultados rápidos, su etapa en Aguascalientes podría ser tan breve como controversial.
Mientras tanto, el Cruz Azul espera beneficiarse con la llegada de Larcamón, un técnico que ha demostrado ser capaz de revitalizar proyectos. La Máquina, que busca recuperar su protagonismo en la Liga MX tras años de irregularidad, podría encontrar en Larcamón la estabilidad que el Necaxa está perdiendo con esta transición.
El Necaxa en la encrucijada
La llegada de Fernando Gago al Necaxa es un movimiento que divide opiniones. Por un lado, hay quienes creen que su experiencia internacional podría aportar algo nuevo al club; por otro, la mayoría ve en este fichaje un error que podría costarle caro a los Rayos. La salida de Larcamón, un técnico que había dado identidad al equipo, y la llegada de un Gago con un historial cuestionable, pintan un panorama complicado para el Necaxa.
