- Más de 9 mil viviendas han sido detectadas con créditos vencidos o abandono en el estado.
- El programa busca reestructurar créditos a propietarios que desean recuperar su casa.
La Ribera y la zona Oriente concentran los índices más altos de cartera vencida.
Durante el avance del censo de vivienda impulsado por la Secretaría del Bienestar en coordinación con INFONAVIT, se han identificado más de 9 mil viviendas en condición de abandono, impago o invasión en diversos fraccionamientos del estado. Así lo dio a conocer Aldo Ruíz Sánchez, delegado federal de los Programas para el Bienestar en Aguascalientes, quien explicó que el objetivo principal es reestructurar créditos a quienes aún desean conservar su patrimonio.
Ruíz Sánchez aclaró que este esfuerzo no representa una invitación a ocupar casas vacías sin autorización, sino una medida para apoyar a quienes, por motivos económicos, dejaron de pagar sus créditos, pero aún tienen la voluntad de recuperar su hogar. “Es gente que quiere pagar, que hizo el trámite, pero por alguna razón tuvo que dejar de hacerlo”, señaló.
El delegado explicó que el diagnóstico contempla varios tipos de situación: viviendas invadidas, abandonadas y destruidas por pandillerismo. En total, se han registrado 217 viviendas abandonadas, 78 vandalizadas, y un número creciente de casas que fueron ocupadas de manera irregular. La mayoría de estas propiedades se encuentran en fraccionamientos donde las constructoras no lograron vender la totalidad de los inmuebles, y muchas permanecieron sin habitar.
“En esos casos, el crédito nunca se ejerció, y otra gente llegó y las ocupó. Pero todas las viviendas tienen un propietario legal, y a ellos se les está buscando para saber si desean reestructurar su crédito”, puntualizó.
Actualmente, el mayor índice de cartera vencida se concentra en el Fraccionamiento La Ribera y en zonas del oriente de la ciudad. “Del 2004 para acá hubo un boom inmobiliario en el estado, pero no se consideró la capacidad de pago de la gente. Construyeron miles de casas sin saber si se podían pagar”, añadió Ruíz.
Respecto al programa, indicó que INFONAVIT participará en la parte administrativa, pero la estrategia operativa corre a cargo de la Secretaría del Bienestar. Una vez identificado cada caso, se ofrecerán condiciones más accesibles: menores plazos y mensualidades reducidas. “Antes pagaban hasta cinco mil pesos. Ahora, buscamos que sea más barato y justo”, explicó.
Además, enfatizó que la Cuarta Transformación apuesta por un modelo cercano a la gente. “Durante años, el gobierno era: ‘ven tú y a ver si logras algo’. Hoy es: ‘vamos nosotros’. Necesitamos ver a las personas, ir con ellas, a su casa, a su situación”, subrayó.
El censo concluirá en diciembre y dará paso al proceso de regularización. Asimismo, los nuevos créditos buscarán condiciones más equitativas, y se dará prioridad a personas con discapacidad, jóvenes y adultos mayores sin vivienda propia. “Antes de construir más, hay que resolver lo que ya se tiene”, concluyó.




