Dime, ¿por qué te vas?
Parece que se acabó el amor entre el PRI y sus aliados locales, sus hermanitos de tinta electoral, el PAN y el PRD. Los tricolores, con sus declaraciones y la forma de comunicar, están dejando entrever que no piensan formar parte de una virtual coalición rumbo al proceso electoral de 2027, lo que ocasiona una fragmentación todavía mayor dentro de sus filas. Quienes hoy fungen como funcionarios públicos afines al PRI no estarán de acuerdo en soltar el hueso y dejar de percibir dinerito del erario público, por lo que jugarán sus canicas con el blanquiazul y la posible alianza que se geste entre ellos y otros colores.
El líder local del PRI, Kendor Macías, declaró en rueda de prensa que incluso están dispuestos a aceptar de regreso a sus exmilitantes (ya reciclados y chupados por otros partidos), pues algunos de ellos siguen conservando sus derechos. Sin embargo, más que una decisión racional, el no ir en coalición parece una instrucción del delegado, quien suspira por ser candidato a gobernador. Aunque siendo realistas sabe que los números no le alcanzan, quiere aplicar la de muchos candidatos morenistas: muchas veces, perder es ganar. Tal vez dentro de sus aspiraciones pueda sacar alguna coartada o tajada política, aunque eso signifique poner en riesgo a su propio partido, pero no pasa nada mientras todo esté respaldado por Alito Moreno, el líder supremo nacional de los tricolores. En un escenario donde el PRI realmente vaya solo a la elección, el PAN buscará aliarse con otro partido para asegurar una votación estable y evitar sorpresas si la elección se terciara.
Los cobijados
Quienes andan siguiendo la línea de su líder local son los del PRD, pues no quieren que les dé neumonía por destaparse antes de tiempo y todos andan bien cobijados. No hay mucho movimiento en cuanto a la ruta que tomarán para la siguiente elección; se limitan a decir que tienen perfiles (como todos los partidos) y que la continuidad de la alianza con el PAN se definirá desde lo local. Claro, salvo que por debajo de la mesa estén apostando por otros escenarios que ni cuenta nos damos.
Los del Sol Azteca saben que se juegan más que una elección, pues su supervivencia en el sistema de partidos de Aguascalientes depende del resultado. No es poca cosa, pues al ya no tener registro nacional, son ellos mismos los que deben salvarse y mantenerse a flote. Por eso, deben concentrarse en tiros de precisión; cualquier error puede desencadenar un problema mayor.
Los dormidos
Mientras tanto, los nuevos partidos políticos locales –Movimiento Laborista Aguascalientes, Poder y Alternativa Social y Alianza por la Prosperidad de Aguascalientes– parecen más dormidos que despiertos. No logran consolidarse ni estructural ni electoralmente; muchas personas ni siquiera los conocen, no tienen figuras de peso, ni temas para posicionarse en la agenda pública. A sus dirigentes no los ubican y tienen cero contacto con la opinión pública. Hasta parece que estos partidos ya cumplieron su misión: obtener el registro y vivir de las prerrogativas por un tiempo. No aspiran a nada más, ni en la capital ni en los municipios.
A corregir
Tras la polémica por la reforma de las narcomantas, ya buscan enmendar la plana para no caer en la censura de los medios de comunicación y de las notas que versan sobre este tipo de mensajes. La primera en mostrar intención de corregir lo que desde un inicio tenía muchas áreas de oportunidad fue la diputada Alejandra Peña Curiel, quien presentó una iniciativa para que no se configure como delito cuando el tema de las narcomantas tenga fines informativos o periodísticos.
Es probable que el grupo mayoritario de las bancadas del PAN y sus aliados no tarde en presentar una reserva sobre el mismo tema, para no quedarse atrás y que no les ganen el mandado de una propuesta que ellos mismos respaldaron, a pesar de las observaciones de perfectibilidad que la misma reforma contenía. Así que hay que prepararnos para un nuevo debate de fondo y una lucha de egos entre la 4T y la mayoría panista en el legislativo.
Agua que no has de beber
El problema de la mala calidad del agua no es exclusivo de la capital. Muchos municipios también enfrentan dificultades para brindar un servicio apto para el consumo humano. Vecinos del fraccionamiento Santa Bárbara, en el municipio de San Francisco de los Romo, reportaron que el agua en sus viviendas sale en mal estado. Y con mal estado nos referimos a residuos negros y un olor bastante desagradable.
Ya hicieron el reporte al ORGOA (organismo operador del agua de ese municipio), pero, según versiones ciudadanas, no quieren atender reportes hasta que los vecinos presenten su recibo de agua pagado. Ahora resulta que el derecho al agua se determinará por un papelito.
Continúan las inconformidades en el ISSSTE
El ISSSTE en la entidad sigue dando de qué hablar. En esta ocasión, exigen una auditoría tras la destitución del subdirector administrativo, Jorge Humberto Floriano Manzano. De acuerdo con el presidente de la Asociación Cimientos del Magisterio, Francisco Flores, es urgente revisar las finanzas del hospital, pues hay sospechas de un mal manejo administrativo.
A esto se suman los problemas que tristemente ya se han normalizado en el sector salud: falta de insumos, medicamentos, especialistas, etc. Además, Flores denunció que los maestros jubilados que acuden a los servicios del ISSSTE son tratados de mala manera. Así las cosas en esta institución que, desde el inicio del sexenio federal, en lo local no da una, y las quejas siguen creciendo.
Dos de cada tres
En México, dos de cada tres kilómetros de carretera transitan por climas de abandono y olvido. La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) reveló que de los más de 800,000 km de red vial en el país, alrededor de 533,000 km presentan deficiencias graves: baches, fisuras, desprendimientos de carpeta asfáltica y señalización desgastada.
Este mal estado no es un simple dato estadístico; es un lastre diario para millones de personas, afecta la competitividad de las empresas y erosiona la calidad de vida de quienes, día a día, ponen las manos al volante. El presidente nacional de la CMIC, Luis Méndez Jaled, subraya que “durante un sexenio completo no se destinaron recursos para el mantenimiento carretero en los calendarios programados”, y en 2023, no se ejerció un solo peso para conservación vial en muchos tramos estratégicos.
El presupuesto de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) supera los 120,000 millones de pesos, de los cuales apenas 15,000 millones están etiquetados para conservación, cifra insuficiente si consideramos que rehabilitar un kilómetro cuesta alrededor de 3 millones de pesos en zonas planas. La CMIC propone crear un Fondo Nacional de Conservación Vial con recursos etiquetados de manera inamovible, nutrido por aportaciones federales, estatales y de peaje, además de instaurar un Observatorio Ciudadano de Carreteras que evalúe periódicamente el estado de la red vial.
Oigan, ¿y La Pona?
Sin avances el tema de La Pona. Se supone que a estas alturas el municipio de la capital ya debería tener los resultados del estudio encargado para determinar el costo de las hectáreas del terreno perteneciente al sector privado, donde hace unos meses se intentó iniciar construcciones.
Pero, entre tanta cosa que surge en nuestro Agüitas, parece que algunos temas se nos olvidan. Lo mismo sucede con el estudio de impacto ambiental del Río San Pedro, que un juez ordenó realizar a la CONAGUA y que sigue en la congeladora. En fin, pura caja china.




