Alberto García-Aspe Mena, nacido el 11 de mayo de 1967 en la Ciudad de México, es sin duda uno de los mediocampistas más destacados en la historia del fútbol mexicano. Con una carrera que abarcó casi dos décadas entre clubes nacionales e internacionales, dejó su huella tanto en el campo como fuera de él.
De los inicios universitarios al profesionalismo
García Aspe dio sus primeros pasos profesionales con los Pumas de la UNAM en 1984, donde rápidamente se convirtió en pieza clave en la media cancha. Su visión para el juego, su llegada al gol y su capacidad para dirigir el ritmo del partido lo hicieron destacar desde muy joven.
Después de varios años en Pumas, su carrera lo llevó a otros clubes mexicanos de gran peso: Necaxa, América y Puebla, además de una breve etapa en el exterior con River Plate de Argentina.
Selección nacional: liderazgo y goles decisivos
Con la camiseta del Tri, García Aspe fue un referente a finales de los 80 y durante los 90. Debutó internacionalmente el 21 de febrero de 1989 en un partido contra Guatemala, y entre ese año y su retiro acumuló 109 apariciones y 21 goles con la selección, cifras notables para un mediocampista.
Participó en tres Copas del Mundo (1994, 1998, 2002), y tiene el mérito de ser el primer jugador mexicano en anotar gol en dos ediciones distintas del Mundial: uno de penal ante Bulgaria en 1994, y otro, también de penal, ante Bélgica en 1998.
Palmarés y estilo de juego
En lo colectivo, Alberto contribuyó a varios títulos nacionales importantes: campeón de liga con Pumas (1990-91), con Necaxa, y otros campeonatos de múltiples competiciones nacionales, además de ganar torneos internacionales de clubes como la Copa Campeones CONCACAF con UNAM y la Recopa de la CONCACAF con Necaxa.
Su estilo se caracterizaba por la elegancia en el pase, buena técnica, destellos de creatividad ofensiva y un fuerte sentido de liderazgo dentro del terreno de juego, atributos que le valieron el apodo de “El Capitán” en muchas etapas de su carrera.
Después del retiro: comentarista y directivo
Al retirarse en 2002 vistiendo la camiseta del Puebla, García Aspe no se alejó del fútbol. Se desempeñó como comentarista y analista en medios como Televisa Deportes, Fox Sports y W Deportes, participando en programas especializados y cubriendo partidos de la selección mexicana.
También incursionó en la administración deportiva: en 2012 asumió el cargo de Vicepresidente Deportivo de los Pumas de la UNAM, aunque fue relevado del puesto en 2013.
Legado
Alberto García Aspe permanece como un símbolo de profesionalismo, técnica y compromiso con el fútbol mexicano. Más allá de sus estadísticas, su influencia se ve en generaciones posteriores que lo ven como ejemplo de mediocentro completo: capaz de recuperar, distribuir, marcar goles y liderar.




