- El sector privado debe recabar opiniones sobre el T-MEC ante la apertura de consultas nacionales
- Reformas a la Ley Aduanera aumentarán obligaciones, ajustarán la figura de agentes aduanales y endurecerán sanciones
- Se destaca la necesidad de coordinación entre cámaras empresariales y autoridades para afrontar los cambios
El vicepresidente nacional de Comercio Exterior y Relaciones Internacionales de Canacintra, Julio Rodríguez Trigueros, advirtió que el sector privado enfrenta un momento coyuntural con la apertura de consultas sobre el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y con las próximas reformas a la Ley Aduanera, que incrementarán las obligaciones para importadores y exportadores.
El empresario destacó que el Diario Oficial de la Federación publicó este 18 de septiembre el inicio del proceso de consulta sobre el T-MEC, lo que obliga a las cúpulas empresariales a recabar las opiniones del sector. “Nos obliga a recabar la información de cómo nos ha ido, qué queremos que continúe y qué queremos que cambie del tratado de libre comercio”, expresó.
Rodríguez explicó que las reformas a la Ley Aduanera, ya incluidas en el paquete económico, podrían entrar en vigor hacia finales de octubre y representan un reto para las compañías. Estas modificaciones abarcan tres áreas principales: mayores obligaciones para importadores, ajustes a la figura de los agentes aduanales y un endurecimiento de las sanciones en caso de incumplimiento. “Se modifica el título octavo de la Ley Aduanera, infracciones y sanciones. Es un claro mensaje de que tienes que actuar perfectamente”, puntualizó.
Advirtió que el enfoque del gobierno federal tiene un trasfondo recaudatorio y que las aduanas se están consolidando como “una excelente caja recaudadora”. Aunado a ello, alertó que las negociaciones del T-MEC incluirán presiones de Estados Unidos para eliminar regulaciones no arancelarias, como las restricciones al maíz genéticamente modificado o la burocracia en trámites ante Cofepris.
Por su parte, Raúl Adames, vicepresidente de Canacintra Aguascalientes, señaló que las pequeñas y medianas empresas serán las más vulnerables, al no contar con estructuras internas para adaptarse con rapidez. “La regulación se va a complicar mucho. Si yo como empresa estoy acostumbrado a que mi agente aduanal haga todos los trámites y no me preocupo por crear un equipo interno, seguramente vamos a estar viendo sanciones, multas y retrasos”, indicó.
Ambos coincidieron en que la coyuntura exige trabajo coordinado entre cámaras empresariales y autoridades, a fin de que México pueda afrontar con éxito los cambios en materia comercial y aduanera.




