Nacido el 23 de mayo de 1951 en el barrio de Tepito de la Ciudad de México, Carlos Zárate Serna se forjó como una leyenda del boxeo mundial gracias a su implacable pegada, sus rachas históricas de nocauts y su reinado como campeón del mundo en la división de peso gallo.
De Tepito al ámbito mundial
Zárate debutó como profesional en 1970. Su carrera se caracterizó por dos impresionantes rachas de victorias por nocaut: la primera, de más de 20 peleas ganadas antes de sufrir su primera derrota, y luego otra que superó los 20 nocauts consecutivos. Ello lo convirtió en uno de los punchers más temibles de su tiempo.
Título mundial y dominio
En 1976 obtuvo el cinturón de campeón mundial del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en la división de peso gallo, e inició un reinado que se extendió hasta 1979. Durante ese tiempo, defendió su título varias veces, muchas por nocaut, consolidando su fama como uno de los campeones más fulminantes del boxeo mexicano. Su récord final fue de 66 victorias (63 por nocaut) y 4 derrotas.
Estilo, impacto y legado
Apodado “El Cañas”, Zárate fue conocido por su estilo ofensivo, su capacidad para noquear con potencia desde los primeros asaltos y por mantener una efectividad de nocaut raramente vista. Fue nombrado por la revista The Ring “Peleador del Año” en 1977 y fue clasificado entre los 100 mejores nocautistas de todos los tiempos.
Retos fuera del ring y transformación
Tras su etapa de gloria, Zárate enfrentó dificultades personales, incluyendo adicciones y problemas financieros. Sin embargo, logró rehacer su vida, convertirse en mentor y entrenador, y usar su experiencia como ejemplo y advertencia para nuevas generaciones.
¿Por qué es un ícono del boxeo mexicano?
- Representa el poder ofensivo del boxeo latinoamericano en su época.
- Su récord y estadísticas lo sitúan entre los más grandes del peso gallo.
- Su historia, de superación personal, lo convierte en un referente más allá del deporte.




